La creación de imágenes y efectos digitales dentro de contextos de la realidad se facilita enormemente con un reciente desarrollo llamado Pixelstick, con el que fotógrafos y productores audiovisuales podrían evitarse la renta de grandes estudios con pantallas verdes o por la compra de esos incosteables softwares de producción y postproducción.
Con Pixelstick, proyecto de crowdfundig publicado en Kickstarter, se pueden agregar diseños abstractos y animaciones fotos de larga exposición o timelapse, por lo cual se requiere que el autor tenga el equipo correcto y los conocimientos adecuados para manejar imágenes de longitud de exposición para mover la fuente de luz dentro de la trama.
PixelStick lee las imágenes creadas en Photoshop (o el editor de imágenes de elección) y muestra una línea a la vez. Consta de 198 LEDS de color RGB dentro de una carcasa de aluminio ligero. El cerebro de PixelStick, montado en una caja pequeña, lee las imágenes desde una tarjeta SD y cada LED corresponde a un único pixel en la imagen. Las imágenes en sí pueden ser de uno a 198 pixeles de altura y muchos miles de pixeles de ancho.