La publicidad política dentro de Estados Unidos se ha disparado en últimas fechas, debido a la importancia que tienen las elecciones intermedias.
Trump se ha caracterizado por lanzar campañas sumamente mordaces, colocándose como una de las personalidades políticas más polémicas de EU.
Hay una serie de estrategias que debemos de tomar en cuenta, cuando el mercado de medios parece tomar posturas mediante la publicidad que exhibe.
Las campañas que se han lanzado de cara a las elecciones intermedias en Estados Unidos cuentan todo tipo de historias, sin embargo, la más reciente de ellas ha sido lanzada por Donald Trump en contra de la caravana migrante y el resultado se ha convertido en una lección de la que pueden aprender los medios al momento de mostrar publicidad.
El mercado político invierte hasta ocho mil 920 millones de dólares, tal como ha estimado Borrell Associates para las elecciones intermedias en Estados Unidos de este 2018.
La estimación confirma lo importante que es la publicidad política para los medios por el valor económico que representa, sin embargo, a pesar de lo jugoso que son estas inversiones, el contexto es fundamental para saber cuándo sí y cuándo no mostrar estas campañas.
Trump decidió lanzar una campaña en contra de la caravana migrante y para dramatizar la historia mostró a Luis Bracamontes, un ciudadano mexicano que asesinó a dos policías, hecho por el que recibió una condena de pena de muerte.
El caso de Bracamontes fue usado por Trump en su campaña contra la caravana migrante, asegurando que por casos como este, se debe detener el ingreso de los hondureños a su país.
La historia encendió las críticas, CNN se negó a pasarla y aunque NBC si la transmitió, desistió de seguirla mostrando por la serie de ataques de los que fue objeto y que nos recuerdan el rol que juegan los medios al momento de mostrar campañas, pues esta simple acción debe empatar con los valores que promueven como canales.
This ad? ? pic.twitter.com/KG24v77XPH
— Trump Democrat (@trump_democrat) 5 de noviembre de 2018
Tras haber mostrado la campaña, NBC publicó un comunicado en el que advirtió que tras haber revisado la campaña desistía de seguir mostrándola al considerar la campaña material insensible.
Un ejemplo que nos ayuda a entenderlo con casos ocurridos en México, nos recuerda el reporte que hicimos sobre W Radio, tras negarle la entrada a un actor por haber acudido con su hijo, a pesar de que la acción tomada por parte de la radiodifusora y que fue denunciada por Leonardo Ortizgris, contrasta con su código de ética, en específico su capítulo de protección a infantes, en el que advierte: “Sensibilizar con los problemas de la infancia a todos los profesionales relacionados con la preparación de la programación (…) Fomentar que los presentadores o conductores de programas en vivo adviertan las situaciones que puedan afectar a la protección de niñas, niños y adolescentes de forma que se minimicen los eventuales perjuicios que puedan causarles (…) Propiciar el desarrollo armónico de la niñez (…) Proporcionar diversión y coadyuvar el proceso formativo en la infancia”.
CNN has made it abundantly clear in its editorial coverage that this ad is racist. When presented with an opportunity to be paid to take a version of this ad, we declined. Those are the facts. ?
— CNN Communications (@CNNPR) 3 de noviembre de 2018
To our @willandgrace fans—I want you to know that I am ashamed that my network aired this disgusting racist ad. It is the antithesis of everything I personally believe in, and what, I believe, our show is all about. @nbc pic.twitter.com/CLinZKHB47
— Debra Messing (@DebraMessing) 5 de noviembre de 2018
