PepsiCo dio a conocer ganancias mejores a las esperadas en el tercer trimestre, con buenas performances de sus tés, Gatorade, Pepsi y otras bebidas en los mercados emergentes, incluida Latam.
El aumento del 17 por ciento se lee como una victoria para Indra Nooyi en su último día como directora ejecutiva.
En Estados Unidos y Canadá, en tanto, el resultado estuvo debajo del pronosticado. Las ventas de Pepsi, Gatorade y Mountain Dew aumentaron un 2 por ciento (hasta US$ 5.460 millones) en el tercer trimestre, pero no alcanzaron la estimación promedio de los analistas, que calculaban US$ 5.600 millones.
En este sentido, Nooyi dijo: “Continuamos teniendo un desempeño operativo muy sólido de nuestras divisiones internacionales, impulsado por los mercados en desarrollo y emergentes”, publicó Reuters.
Nooyi seguirá siendo presidente hasta principios de 2019.
Bajo la dirección de Nooyi, PepsiCo ha intentado ingresar (a veces con éxito, otras veces no) al negocio de otras bebidas como jugos, tés y compuestos deportivos, esto en el contexto de cambios en los hábitos de consumo de los consumidores que cada vez más rechazan las bebidas gaseosas.
Tras la salida de Nooyi, tomará el timón de PepsiCo el español Ramón Laguarta, un ejecutivo que está en la compañía desde hace 22 años.
En números: en el tercer trimestre de 2018 los ingresos netos de la compañía aumentaron hasta US$ 2.500 millones (US$ 1,75 por acción). Un año antes, esos mismos valores eran US$ 2.140 millones y US$ 1,49.
El beneficio operativo total para el tercer trimestre cayó un 3 por ciento, pero las ganancias por acción fueron poco más del 17 por ciento.
Compra de SodaStream
En agosto pasado, y como parte de la estrategia de diversificar el negocio de los refrescos, la compañía anunció planes para comprar al fabricante de bebidas carbonatadas en el hogar SodaStream por US$ 3.200 millones.
SodaStream fue pionera en la conformación del mercado de la fabricación de refrescos en el hogar, pero en los últimos años comenzó a promover el producto como una herramienta para producir agua carbonatada, en línea con los cambios de los gustos de los consumidores.
De esta forma, PepsiCo ingresa con una sola adquisición en el negocio del agua y de los dispositivos domésticos, analiza el Financial Times.
El dólar fuerte, un problema
PepsiCo dijo en el reporte que espera un crecimiento de ingresos para el año fiscal del 3 por ciento. También explicó que un dólar fuerte tendrá un impacto negativo en sus ganancias de en un punto porcentual. Como resultado, anticipa ganar US$ 5,65 por acción en el año fiscal 2018, un 8 por ciento más que en 2017.