“La crisis argentina se profundiza cuando el jefe del Banco Central renuncia después de 3 meses en el cargo”. El título principal de la edición internacional del miércoles 26 de septiembre del Financial Times resume la grave situación por la que atraviesa la Argentina en materia económica.
El periódico especialista en finanzas internacionales hace foco en lo que sucede en Argentina porque entiende que la situación se advierte como insostenible.
El peso perdió la mitad de su valor respecto del dólar en ocho meses, la inflación finalizará 2018 por arriba del 42% y la economía está cayendo en un pozo del que será muy complicado salir.
En el medio, un pedido de financiamiento externo que derivó en un crédito del FMI por US$ 50.000 millones que ahora no es suficiente, por lo que el presidente, Mauricio Macri, y el ministro de Finanzas, Nicolás Dujovne, están en Estados Unidos tratando de conseguir una ampliación.
Como si todo esto fuera poco, en Buenos Aires, renunció este martes el presidente del Banco Central, Luis Caputo, pieza clave para sostener el tipo de cambio.
Eso ocurrió casi al mismo tiempo que Macri asistía al Global Citizen Award con altos ejecutivos internacionales, donde hasta sacó a bailar a la vicedirectora ejecutiva de la fundación Atlantic Council en pleno escenario.
Un Mauricio Macri distendido y sonriente sorprendió durante su intervención en el Global Citizen Award. Tomó el micrófono para “reclamar” su premio y hasta sacó a bailar la vicedirectora ejecutiva de la fundación Atlantic Council en pleno escenario. https://t.co/iMexhnaN5w
— Radio Mitre Córdoba (@radiomitrecba) 25 de septiembre de 2018
“El presidente del Banco Central de Argentina renunció luego de solo tres meses en el cargo, lo que provocó una caída del 5 por ciento del peso y golpeó los intentos del presidente Mauricio Macri de restaurar la confianza de los inversionistas en medio de una crisis monetaria”, explica el Financial Times.
“El momento no podría ser peor para Argentina”, le dijo al medio inglés Paul Greer, gerente de cartera de Fidelity.
La Argentina está en medio de una ola de salida de los inversores de los mercados emergentes. El problema: están preocupados porque los gobiernos y las empresas en el mundo en desarrollo no puedan pagar miles de millones en deudas nominadas en dólares a medida que la moneda estadounidense continúa recuperándose.
Sin reacción
Macri prometió bajar drásticamente el gasto público y el Banco Central argentino elevó las tasas de interés a un máximo mundial del 60 por ciento (no hay otro lugar de la Tierra con ese nivel de tasa). Sin embargo, la situación no mejora.
Para Greer, la salida de Caputo ocurrió al mismo tiempo que los mercados financieros están viendo muy de cerca la realidad Argentina, analizando si el FMI le permitirá al Banco Central que “siga agotando reservas internacionales para sostener el tipo de cambio en los niveles actuales”.
Aunque el Gobierno aludió a “razones personales”, la salida de Caputo tiene que ver con la “muy mala” relación del ahora ex directivo del Banco Central con el FMI, analiza el FT. “Estaba pidiendo permiso para intervenir en el mercado de divisas y eso causó temor en el FMI”, agrega.
Caputo, un ex agente bursátil, será reemplazado por Guido Sandleris, un economista que trabajó anteriormente en la Reserva Federal de Minneapolis, en el banco central de Chile y en el propio FMI.