Lula da Silva no podrá ser candidato a presidente en Brasil, así lo confirmó la Justicia este martes, por lo que el Partido de los Trabajadores debió buscar de urgencia un nuevo candidato que lo reemplace.
En rigor, el candidato ya estaba designado desde hace semanas, pero no se confirmaba su postulación con la esperanza de que el ex presidente, que lidera por lejos con la mayor intención de voto, pudiera estar entre las opciones del próximo 7 de octubre (la segunda vuelta será el 28).
Sin embargo, con la confirmación por parte de los tribunales, la estrategia del PT es tratar de convencer a ese 40% del electorado que votaría a Lula, que Fernando Haddad, su reemplazante, “es Lula”.
En eso se basa la campaña que comenzó esta semana en Brasil.
“Haddad es Lula” dice el eslogan que acompaña todas las propagandas políticas del PT, incluso con imágenes entremezcladas del ex presidente y del nuevo candidato.
Haddad es un ex profesor universitario de Sao Paulo y uno de los pocos nombres del PT que no se ha visto eclipsado por Lula ni ha recibido denuncias por corrupción, los dos mayores problemas del partido que gobernó una década en Brasil.
Tras seis años como ministro de Educación de Lula y Dilma Rousseff, llegó a ser alcalde de Sao Paulo y tuvo mucha aceptación. Sin embargo, cuando el resentimiento contra el PT era generalizado (Lava Jato mediante), perdió la reelección a la misma alcaldía.
En todas las propagadas de campaña, se intenta hacer ver que votar a Fernando Haddad es lo mismo que votar a Lula. En este caso, en unos spots difundidos por la candidata a vicepresidenta, Manuela D’Avila.
Vamos juntos fazer o Brasil feliz de novo! #HaddadÉLula #ManuNoJaburu #LulaManuHaddad pic.twitter.com/ANav77RbdO
— Manuela (@ManuelaDavila) 11 de septiembre de 2018
Vamos continuar juntos! @LulaOficial @Haddad_Fernando #LulaManuHaddad #OBrasilFelizDeNovo #ManuNoJaburu pic.twitter.com/sVIfTLTMtn
— Manuela (@ManuelaDavila) 11 de septiembre de 2018
La encuesta de Datafolha dada a conocer este lunes, ya sin Lula (que tenía más del 40% de intención de voto), ubica al ex banquero central y ex ministro de Hacienda Henrique Meirelles con 3% de intención; el ex gobernador de Sao Paulo, Geraldo Alckmin, tiene 10% y Bolsonaro, el ultraderechista agredido la semana pasada, lidera con 24%.
Entre los laboristas, Ciro Gomes alcanza el 13% y el heredero de Lula, Fernando Haddad, tiene el 9% de intención de voto, pero el relevamiento se hizo sin la confirmación de la ausencia del ex presidente.