Dentro de las negociaciones de la nueva versión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) el comercio electrónico es también motivo de diálogo para alcanzar una cantidad en la que, superior a la misma, se cobren impuestos.

De acuerdo con un trascendido de El Financiero, el e-commerce o paquetería, conocido como “de minimis”, se establecería en 100 dólares, cantidad que representa un incremento de 50 unidades respecto al límite que México mantiene en la actualidad.

La Organización Mundial de Comercio (OMC), refiere que “de minimis” son las cantidades mínimas de ayuda interna que están permitidas, aún cuando tengan efectos de distorsión del comercio.

Es precisamente por este apartado que en la mesa de negociaciones se ha fijado una cantidad que aplique a los tres países del tratado (Estados Unidos, Canadá y México).

Como ya se dijo antes, en el país la cantidad para no pagar impuestos esta situada en los 50 dólares, mientras que en Estados Unidos es de 200 dólares, al tiempo que en Canadá es apenas de 16 unidades. Si bien el vecino país del norte pujaba para que esta cifra se fuera hasta los 800 dólares, el centenar de unidades es una cantidad que agrada más a los analistas.

Alfonso Reyes, abogado especializado en derecho informático y propiedad intelectual, detalló al medio, elevar el “de minimis” a 100 dólares podría impactar a productores nacionales, principalmente a las micro, pequeñas y medianas empresas. “Al final de cuentas, si hay producto que puedes conseguir vía la importación, sin impuestos a un precio inferior al que lo estás dando de venta al público, mejor se importaría, la verdad es que te pega en competencia, sobre todo a las Pymes nacionales”.

No obstante, esto ampliaría la exposición de mercado de las Pymes, no solo en el segmento de “de minimis” sino en la facilitación de los procedimientos normativos en la finalidad de impulsar la internacionalización de las mismas. De igual forma, para la administración entrante al mando de Andrés Manuel López Obrador, dotaría de mayor recaudación del Impuesto al Valor Agregado en caso de que se aplicara el cobro de este gravamen al comercio digital, indicó el SAT.