Datos de EY proyectados por el sitio web especializado Statista, revelaron que LVMH es la compañía número uno dentro del mercado de lujo, con ganancias de 39 mil 377 millones de dólares, seguida de Kering, con 12 mil 875 millones de dólares.
Burberry también se ubica como una de las compañías de lujo más destacadas, adaptándose a las tendencias tecnológicas y al nuevo perfil de los consumidores.
Su renovación quedó clara con la salida de Christopher Bailey de la dirección creativa de Burberry, un personaje que definió la adaptación de la marca a apuestas sumamente exitosas como la campaña The Tale of Thomas Burberry, con más de 15 millones de reproducciones en YouTube.
El día que anunciaron que Riccardo Tisci sería el nuevo director creativo, se supo que no sería una evolución pausada. Tras doce años al frente de un clásico de la costura, Givenchy, el italiano se estrena este año a las riendas de otra firma histórica.
La mejor manera de demostrar una renovación de la marca es un rebranding, por lo que por primera vez en dos décadas, la firma cambiará de imagen.
Desde el Instagram de Burberry han publicado esta mañana una serie de e-mails en los que Riccardo Tisci prepara el lanzamiento de la nueva imagen de la firma junto al estudio creativo Peter Saville.
El monogram que representará a la firma a partir de ahora, es un entramado a base de Ts y Bs en homenaje a Thomas Burberry, fundador de la casa, que se colorea en naranja rojizo, blanco y color miel. El diseñador se ha inspirado en su visita a los archivos de la casa para dar vida a esta nueva imagen.
Su logotipo también se verá impactado por esta transformación, ha evolucionando a una tipografía de palo seco. La última vez que realizaron un cambio en él fue hace casi veinte años, en 1999, cuando se eliminó la “S” del nombre de la marca.
La identidad visual es una parte fundamental para una marca, ya que gracias a los logotipos, tipografía, y colores, entre otros elementos gráficos, los consumidores las identifican, incluso los lleva a amarlas o rechazarlas.
Por ello, es un tema que las compañías evitan, hasta que se trata de un tema positivo, como refrescar la imagen o reflejar evolución. Renovarse o morir, las marcas practican el rebranding en su intento por mejorar su relación con los clientes.