Justo hace unas horas mencionábamos que la marca de productos lácteos Lala volvería a sus actividades en su planta de distribución en Tamaulipas porque las condiciones de seguridad en la región habían mejorado, cuando se anuncia que otra marca dejará de distribuir sus productos en otra localidad.
Ahora se trata de Bimbo, que ha anunciado que dejará de distribuir sus productos en establecimientos de retail de la zona suburbana de Acapulco, la más importante del estado de Guerrero.
Lo anterior se desprende de la información divulgada por el portal web de Reforma, que especifica que algunas de las colonias en donde la inseguridad obliga a suspender la distribución de los productos de panificación son Ciudad Renacimiento y Emiliano Zapata, entre otras.
Otras marcas que han suspendido actividades por inseguridad
Como te informábamos, apenas en mayo pasado Grupo Lala había dejado las actividades en su centro de distribución en el estado de Tamaulipas, en Ciudad Mante, acción que fue revertida en días pasados, a mediados de julio, acción que parecía ser una buena noticia para la confianza tanto de la marca como de las población en esta región.
Pero se sabe que las condiciones de seguridad no pueden ser las mismas en las diferentes regiones del país. También te mencionábamos ejemplos de las marcas Domino’s Pizza, PepsiCo, Foly Muebles, y la lechera Sello Rojo que en otros momentos dejaron la misma región tamaulipeca.
En el propio estado de Guerrero, a su vez, la embotelladora Coca-Cola Femsa anunció en marzo pasado el retiro de su centro de distribución en Ciudad Altamirano, Guerrero. Pero estos hechos no sólo se han registrado de manera reciente.
Y por la fuerte incidencia de de homicidios, secuestros y enfrentamientos entre grupos del crimen organizado, desde mayo 2013 ya se anunciaba la migración hacia otras regiones de las compañías Saba y Danone establecidas en el estado de Michoacán.
Como se puede notar, las condiciones de seguridad no son las mismas en diferentes regiones y las marcas y empresas sortean serias dificultades al poner en riesgo a su capital humano y a las ganancias que pueden obtener por causa de las acciones del crimen organizado en diversas zonas del país. Se trata gran reto, mayúsculo, para el próximo gobierno que arrancará a partir del 1 de diciembre.