Tanto Kim como Kourtney Kardashian han encontrado en la capital estadounidense el segundo escenario, después del de medios, para impactar con su influencia.
Hace semanas, Kourtney acudió a el Capitolio para promover una reforma en la FDA y lograr que se establezcan nuevas normas al mercado de maquillajes.
Kim Kardashian mantuvo una reunión con el presidente Donald Trump para interceder a favor de Alice Marie Johnson, una afroamericana que enfrenta una condena de cadena perpetua por un cargo de drogas sin violencia.
Luego de burlas y críticas en redes sociales, finalmente Kim logró lo que nadie, influyó en el presidente Trump.
Trump decidió conceder clemencia a la bisabuela Johnson, de 63 años de edad, quien se encuentra actualmente cumpliendo la condena de cadena perpetua.
Luego de enterarse de su logro, agradeció al Primer Mandatario estadounidense por medio de sus cuentas oficiales de redes sociales, plataformas con millones de seguidores.
So grateful to @realDonaldTrump, Jared Kushner & to everyone who has showed compassion & contributed countless hours to this important moment for Ms. Alice Marie Johnson. Her commutation is inspirational & gives hope to so many others who are also deserving of a second chance.
— Kim Kardashian West (@KimKardashian) 6 de junio de 2018
Kim finalmente es una influencer con un impresionante alcance y aunque la intención del presidente Trump no fuera la de promover su lado “positivo”, de igual forma lo está haciendo gracias a Kim.