El 2018 es un año decisivo para México, no por el mundial de fútbol sino porque se celebrarán las elecciones federales el próximo 1 de julio y, en ellas, se define la elección del próximo presidente del país.
Sin duda, esto ha traído consigo una aplanadora carga de información, campañas propagandísticas y campañas en social media. Asimismo, se han identificado varios casos de desinformación o fake news (incluso en los debates).
Ante tal contexto, se da la visita de Kofi Annan, ex secretario de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y premio Nobel de la Paz, quien será parte de los observadores internacionales de la elección y, como parte de ello, participó en la conferencia magistral Paz y Democracia, organizada por el Instituto Nacional Electoral (INE).
En ella, Annan expuso algunos puntos contundentes sobre el significado de la democracia, el poder del voto y el riesgo que suponen las fake news, las redes sociales y la violencia que se vive en México.
Aquí algunas frases del ex secretario de la ONU:
“En una era de escepticismo público y de noticias falsas, mantener la confianza del votante en el proceso electoral, es un esfuerzo complicado y multifacético”.
“Existe muy poca confianza en las instituciones y los gobiernos, y para restablecerse necesitamos adaptarnos a los cambios rápido”.
“Revelaciones recientes han subrayado la vulnerabilidad de los votantes en la era del big data y han sembrado la duda de si ahora la tecnología representa una amenaza para la democracia o si representa ser su salvación”.
“Mientras que las democracias maduras suelen tener instituciones robustas, competentes y profesionales, imaginen ustedes la vulnerabilidad de países menos desarrollados con instituciones y Estado de Derecho débiles, en donde los valores y el ethos de la democracia recientemente comienzan a hacer raíces”.
“Los sistemas políticos no se han adaptado al desarrollo económico, lo que crea altos niveles de desigualdad y una creciente sensación de privación de los derechos económicos. La globalización ha traído consigo cambios increíbles. Sin embargo, sus beneficios no han sido compartidos equitativamente. Tal y como la riqueza se concentra, también el poder político y las influencias”.
“Docenas de políticos, candidatos, así como familiares de los actores políticos, han sido asesinados desde el inicio de esta campaña. Sin control, la violencia criminal plantea una seria amenaza a las instituciones democráticas y sin duda a la democracia misma”.
“Las elecciones ordenadas son la mejor respuesta a la violencia que busca privar a los ciudadanos de sus derechos de elegir a sus líderes nacionales y locales, libres de intimidación”.
Las palabras del premio Nobel de la Paz son contundentes y aplican en un contexto en el que el país ha vivido más de doce años afectado por la violencia del crimen organizado, la creciente y en ocasiones cínica proliferación de la corrupción, la ineficiencia de las instituciones impartidas de justicia y el deterioro del poder adquisitivo agravado por la volatilidad económica.
Si esto le sumamos la incesante difusión de contenidos falsos o tergiversados con el objetivo de descnfomrar al electorado (en ocasiones incluso en los debates organizados por el INE), el uso de las redes sociales como arma propagandística en lugar de canal de comunicación para difundir una plataforma política o plan de nación, y el evidente desinterés de la población por votar, el llamado de Annan para no dejar escapar el derecho de votar, es de suma relevancia.
Ojalá esto sirviera para que desde los diferentes frentes atendieran las palabras del ex secretario de la ONU para empezar a ejecutar reales acciones de marketing político y no sólo propaganda. Sin embargo, esto luce diferente, quedará en la sociedad escucharlas para estar atentos e identificar la información que deja poco o nada para discernir el discurso político y prepararse para ejercer su derecho al voto lo mejor informados y preparados posible.