La industria de los videojuegos es una de las que más expectativa puede generar en las audiencias, sólo para el cierre de este año, se estima que representará ingresos por casi 90 mil millones de dólares, según estimaciones de PwC.
Uno de los géneros que más popularidad tienen entre los usuarios son los relacionados con los deportes y, dentro de esta categoría, uno de los de mayor abolengo es el Pro Evolution Soccer (PES), pero todo indica que podríamos dejarlo de ver en los estantes en un futuro.
Este miércoles la Unión de Asociaciones Europeas de Fútbol (UEFA) anunció el fin de un contrato de exclusividad que sostiene desde hace una década con la desarrollada de videojuegos Konami.
De acuerdo con el organismo europeo, que la conclusión de su relación de negocios y marketing se hará efectiva cuando termine el Mundial de Rusia 2018, un momento crucial si se considera que la compañía japonesa debería estar planeando el lanzamiento del PES 2019 y que el interés por los eSports tiene un crecimiento importante.
Para algunos analistas, la finalización del patrocinio entre Konami y la UEFA puede ser una señal de que la franquicia del Pro Evolution Soccer podría llegar a su fin en un futuro cercano. Esto debido a que ha perdido peso en el mercado, aunque estimaciones marcas que el PES 2018 ha vendido más de 2.3 millones de copias, está lejos del FIFA 18, franquicia de EA Sports con más de 10.3 millones.
Además, después del mundial, Konami no podrá usar los torneos de la asociación europea en ninguno de sus juegos como la Champions League o Europa League, valores agregados que hacían destacar al Pro Evolution Soccer.