Los eventos o event marketing son uno de los recursos en la industria de la mercadotecnia que, de ejecutarse adecuadamente, pueden ayudar a posicionar una marca, producto o servicio, así como profundizar el vínculo con el público.

Al respecto, un estudio reciente realizado por Event Marketing Institute, revela que el 89 por ciento de las compañías que implementan estrategias de event marketing lo hace para incrementar sus ganancias, mientras que un 86 por ciento apuesta por estos desarrollos para impulsar el brand awareness.

Y, sin duda, dentro de la industria del entretenimiento, los festivales de música y artes se han logrado posicionarse entre los más atractivos para el público, por lo que atraen a un gran número de marcas.

Hemos transitado de la pasón y energía que se vivió hace más de cincuenta años en Woodstock a enormes festivales que congregan música, expresiones gráficas, cine, gastronomía, incluso marcas que frecen experiencias a los asistentes.

Sólo en México tenemos varios ejemplos: el Corona Capital, Vive Latino, Ceremonia, NRML, Pa’l Norte, Trópico, Cumbre Tajín, entre otros. Pero, a nivel mundial la organización de este tipo de eventos es enorme, Coachella Valley Music and Arts Festival, Lollapalooza, Glastonbury, Reading Leeds Festival, Rock am Ring, y el Pinkpop Festival son algunos de los más importantes.