La justicia suprema de EspaƱa confirmĆ³ dos sanciones por 10 y 6.9 millones de euros al banco Santander, por dos infracciones, una de ellas grave y otra no tan grave, debido a la comercializaciĆ³n entre sus clientes de un producto ācomplejo y novedosoā denominado Valores Santander.
De acuerdo con el organismo, la instituciĆ³n financiera, calificĆ³ sus valores como un producto amarillo, es decir, con un riesgo de complejidad media, lo que suponĆa, conforme al Manual procedimientos de Grupo Santander, para la comercializaciĆ³n minorista de productos, que deberĆan de ser ofertados de forma generalizada entre los clientes que, al margen de sus objetivos y experiencia de inversiĆ³n, tuvieran un patrimonio superior a los 200 mil euros.
Sin embargo, esto no sucediĆ³ asĆ, segĆŗn diversos reportes de prensa el banco procediĆ³ con criterios meramente patrimoniales, de manera que, sin tomar en cuenta la experiencia en inversiĆ³n ni los objetivos de inversiĆ³n de los clientes, procediĆ³ a clasificarlos en tres categorĆas; los que contaban con 500 mil euros o mĆ”s, aquellos que tenĆan entre 200 mil y 500 mil euros, asĆ como las personas con patrimonios inferiores a los 200 mil euros.
Por lo que para La Sala no quedĆ³ claro que el grupo financiero cumpliĆ³ con la obligaciĆ³n de recabar informaciĆ³n asĆ como perfilar a los clientes, ni tampoco que diera instrucciones o directrices que tuvieran como finalidad impartir criterios objetivos para que la adecuaciĆ³n del producto final se hiciera de forma relativamente homogĆ©nea.
A su vez, se argumentĆ³ que en el momento de imponer la sanciĆ³n, la entidad habĆa infringido, entre otras obligaciones, el deber de informaciĆ³n al cliente en el proceso de adquisiciĆ³n de estos valores ofertados como una renta fija sin riesgos. De acuerdo con EFE, con la emisiĆ³n, valorada en siete mil millones de euros, Santander buscaba financiar la compra del Banco Real, hace tiempo subsidiaria del grupo holandĆ©s ABN Amro en Brasil.
SegĆŗn las estimaciones, alrededor de 130 mil clientes fueron testigos de cĆ³mo el valor de sus inversiones se reducĆa hasta en un 55 por ciento durante la conversiĆ³n de bonos durante 2012, al pagar cada acciĆ³n a 16.04 euros cuando cotizaban en seis.