Desde hace algunos años, Google y Oracle se enfrentan en los tribuales por una cuestión de derechos de autor que tiene que ver la presencia de Java en Android. Ahora la marca estrella de Alphabet parece haber perdido la batalla luego de la Corte de Apelación de los Estados Unidos determinara que el uso de la plataforma de desarrollo de Java de Oracle por parte de Google para crear el sistema operativo Android no está protegida por las leyes de uso razonable del copyright.
De esta manera, según información de CNN, las autoridades correspondiente determinaron que el gigante de las búsquedas online violó las leyes de derechos de autor cuando utilizó el software Java de código abierto de Oracle para construir la plataforma Android en 2009.
Esto sucedió aún cuando durante 2016, un jurado determinó que el uso de las API de Oracle por parte de Google era legal según la doctrina de uso justo de la ley de derechos de autor, que permite el uso gratuito de material protegido por derechos de autor bajo circunstancias específicas.
Tal y como reportan desde Reuters, la decisión de los juristas podría costar miles de millones a Google si consideramos que hace dos los Oracle solicitaba un pago por 9 mil millones de dólares por esta violación de derechos de autor.
No obstante, las consecuencias de la posible sentencia a Google podrían ir más lejos que una multa para la reconocida firma tecnológica. Serán miles de compañías las que podrían perder tras esta decisión.
Un gran número de desarrolladores confían en el software de código abierto para desarrollar sus propias plataformas. La decisión del jurado significa que algunos tendrán que pagar para licenciar cierto software o desarrollar uno propio desde cero. lo que supondría un cambio significativo en cómo se desarrollan los programas en todo el mundo.
El problema no es nada menor si consideramos que Java es el tercer lenguaje de programación (39.7 por ciento) más utilizado en el mundo, sólo por debajo de JavaScript (62.5 por ciento) y SQL (51.2 por ciento).
Casos como este, dejan en claro una vez más que muchas veces aquello que se dibuja como gratis en la era de las nuevas tecnologías, en realidad no lo es y su costo puede ser mucho mayor al que podría suponerse en un inicio.