Cada vez son más recurrentes los incidentes con las mascotas en las aerolíneas. El caso más polémico en este arranque de año es el de United Airlines y una mujer en el aeropuerto de Newark porque pretendía viajar con un pavo real como animal de apoyo.
Ahora, surgió el polémico caso de Belén Aldecosea, de 21 años de edad, quien acusa a Spirit Airlines de causar que lanzara a su hámster por el escusado.
La pasajera aseguró que consultó previamente a la aerolínea para asegurarse que podía llevar a Pebbles a bordo. La usuaria la certificó como mascota de apoyo emocional.
Sin embargo, previo a abordar, la aerolínea le prohibió el paso. Como necesitaba regresar a su casa, en Florida, por un asunto médico y no podía perder el vuelo, intentó alquilar un coche, pero pasaban las horas y ella no sabía qué hacer.
“Pebbles tenía miedo. Yo tenía miedo”, dijo al periódico local Miami Herald. Detalló que al consultar a uno de los empleados, le aconsejó que lo dejara escapar o que lo tirara por el inodoro.
Era horripilante pensar en tirarla por el inodoro
Tras llorar durante 10 minutos, finalmente lo hizo. Lo dejó ir por el drenaje.
El #WTF de la semana: Belén iba a volar a casa con su hamster.
Pero la tragedia le estaba esperando dentro del avión.
No te lo vas a creer. O sí.https://t.co/cxISNYKlSC pic.twitter.com/TwCPAtXnyr— Abel Arana (@AbelArana) 9 de febrero de 2018
Derek Dombrowski, portavoz de Spirit Airlines, reconoció que la compañía cometió un error al asegurarle que podía viajar con Pebbles, pero negó categóricamante que un representante de la aerolínea le sugiriera deshacerse del animal en uno de los baños del aeropuerto
Para ser claros: en ningún momento, ninguno de nuestros agentes sugirió a la pasajera que tirara el animal por el wáter o lo lastimara
Ambos casos mencionados abren una oportunidad para las empresas aéreas sobre qué animales y en qué condiciones debe permitirse que las mascotas viajen en los vuelos comerciales.