El ilusionista David Copperfield fue acusado de haber cometido abuso sexual, en 1988, contra Brittney Lewis, quien dijo haber sido drogada, cuando en ese momento era una aspirante a modelo de sólo 17 años.
De acuerdo con un reportaje publicado el miércoles en el sitio The Wrap, la mujer explicó que el incidente ocurrió tras un concurso de modelaje en el cual el ilusionista participaba como juez. Luego de la presentación, Lewis recibió una invitación para acudir a uno de sus shows en California.
Añadió que si bien perdió el conocimiento poco después, recuerda como Copperfield le quitó la ropa y comenzó a besarla y acariciarla. Dijo que al día siguiente no encontró fluidos que demostraran una violación, pero que esto podría explicarse si el mago utilizó un condón.
Además, la exmodelo afirma que el mago la obligó a escribir y a firmar una carta en la que decía que estaba bien, pero que luego interpretó como un llamado a silencio.
En 2007, Copperfield fue investigado por una causa de acoso sexual por una modelo de 22 años, Lewis dijo que también reportó su experiencia al FBI, pero que nada surgió de la denuncia.
Poco antes de publicarse el reportaje, Copperfield emitió un comunicado en Twitter, recalcando la importancia de que las víctimas de acoso o abuso sexual cuenten su historia, sin embargo pidió al público no apresurarse en juzgar al acusado y recordó que anteriormente fue acusado falsamente de violación.
Apoyó públicamente al movimiento #MeToo; sin embargo, alertó sobre los juicios apresurados ante las denuncias de acoso sexual.
— David Copperfield (@D_Copperfield) 24 de enero de 2018
“El movimiento Me Too es crucial y deseado desde hace mucho tiempo. Todos queremos el empoderamiento de la gente que siente haber sido víctima de conductas sexuales inapropiadas, y como regla debemos escucharlas, de modo que más personas se sientan cómodas y den un paso al frente. Es importante.
Pero imaginen cómo es creer en el movimiento, y habiendo sido acusado falsamente de manera pública en el pasado.
Tener tu vida y la de tu familia de cabeza. Tres años y cientos de noticias publicadas de una denuncia falsa investigada por el FBI, donde el resultado final fue que las autoridades atraparan a la acusadora haciendo la misma denuncia falsa contra otro hombre. La prueba estaba grabada. La acusadora fue arrestada y sentenciada.
He vivido con años de noticias sobre mi sobre actos fabricados y ruines, con pocos contando la historia del acusador siendo arrestado, y mi inocencia. Sabiendo que los falsos acusadores pueden impactar negativamente en la credibilidad de otras, y son un verdadero deservicio a quienes han sido víctimas de conductas sexuales inapropiadas, no atraje la atención a eso.
Así que mientras enfrento otra tormenta, quiero que el movimiento continúe floreciendo.
Siempre escuchen y consideren todo cuidadosamente, pero por favor, por el bien de todos, no se apresuren a juzgar”.