Los fabricantes chinos buscan conquistar el mercado de smartphones, quienes en el tercer trimestre lograron ganancias récord por mil 500 millones de dólares, además de posicionar sus dispositivos entre los equipos más vendidos en el mundo.

De acuerdo con el analista de Counterpoint’s Research, Tarun Pathak, el crecimiento de las marcas chinas se puede atribuir a los esfuerzos para agilizar la cadena de suministro, con una combinación cada vez mayor de teléfonos inteligentes de gama media a alta en su cartera.

El especialista señaló que incluso en el segmento premium, jugadores como Huawei están posicionando sus modelos emblemáticos, justo por debajo de las ofertas premium de Apple y Samsung, a fin de penetrar en este mercado, además de maximizar los ingresos y las ganancias.

Apple continuó comandando la mayor parte de las ganancias de la industria de dispositivos móviles, con casi 60 por ciento, pero se redujo 86 por ciento respecto al mismo trimestre del año pasado, cuando Samsung tuvo que absorber una pérdida debido a la debacle del Galaxy Note 7, según cifras de Statista.

No obstante, Tarun Pathak indicó que el fabricante surcoreano gracias a una demanda relativamente más fuerte de Note 8 y de la serie J de escala media, ha podido capturar casi la cuarta parte de las ganancias mundiales de la industria de dispositivos móviles, equivalente a 25.9 por ciento.

Según datos de Counterpoint’s Research, Apple genera más de 150 dólares de ganancia por iPhone vendido y esto continuará creciendo en el trimestre de la temporada de vacaciones, impulsado por el alto precio de la serie iPhone X; mientras que Samsung obtiene 31 dólares, Huawei 15 dólares, Oppo 14 dólares, Vivo 13 dólares y Xiaomi dos dólares.

El especialista dice que Huawei fue testigo del mayor crecimiento de las ganancias, de 67 por ciento interanual de julio a septiembre, debido a la expansión de su cartera en las bandas de precios.

En tanto que Oppo y Vivo obtuvo el cuarto y quinto puesto en la participación de ganancias de Global Handset, impulsada principalmente por su desempeño en China; mientras que Xiaomi ha tenido un fuerte regreso con un crecimiento en las ganancias de sus dispositivos, de 41 por ciento en este periodo.

“Para Xiaomi, la distribución fuera de línea es la clave para alcanzar a Oppo o la escala de Huawei, pero la mayoría de las ventas de Xiaomi todavía están sesgadas hacia los modelos de gama más baja. Xiaomi necesita un buque insignia premium como Mi Mix 2 o Mi 6 para escalar e impulsar mayores ganancias”.

Durante el tercer trimestre del 2017, el smartphone más vendido fue el iPhone 8, seguido por el iPhone 8 Plus, el Samsung Galaxy Note 8, el Galaxy S8 Plus, el iPhone 6, el iPhone 7, el Vivo X20, el Galaxy S8, el Xiaomi Redmi Note 4 y el Oppo R11.

Según la consultora, Apple comenzó a ganar impulso con el iPhone 8, ya que ambos modelos capturaron las dos primeras posiciones de la lista de los teléfonos inteligentes más vendidos, sin embargo, la anticipación del consumidor del iPhone X, el volumen de ventas limitado en comparación con el iPhone 7.

A su vez, el rendimiento del Samsung Note 8 fue bueno y la serie Galaxy S8 también fue decente secuencialmente, gracias a los movimientos de precios estratégicos de Samsung, además de los buenos comportamientos de las series A y J en las bandas de precios de nivel medio más bajo.

De hecho, al cierre del trimestre, la surcoreana se mantuvo como el líder en el mercado de smartphone a nivel mundial, con una participación de 21 por ciento; seguida por Apple, con 12 por ciento; Huawei, con 10 por ciento; Oppo, con 8 por ciento; Vivo, con 7 por ciento; Xiaomi, con 7 por ciento y LG con 4 por ciento.