Cualquier compañía requiere de un equipo de trabajo que labore para objetivos similares, sin embargo, conductas o una comunicación mal efectuada puede generar malos entendidos, que de no corregirse puede generar resentimientos no procesados, o bien, también existe un perfil de profesionales que son proactivos que resuelven los problemas.
De acuerdo con ME Marketing Services, existen diferencias entre trabajadores, conductas que definen la profesionalidad y los impulsos sin importar el género o edad. Entre las diferencias, destacan:
Uno. Según Marketing services, los amateur suelen hacer eco con cada logro laboral, como si se tratara de un gol de campo, mientras los profesionales comprenden que solo es un impulso inicial y parte de un proceso. Concretamente, los objetivos deben verse como puntos de referencia, y no un fin en una meta.
Dos. Los amateur creen que son buenos en todo, mientras los profesionales entienden sus debilidades. Si bien se trata de un error de novato, existen personas que se enfocan en algo y subcontratan lo demás, cuando lo correcto es aprender todo el proceso, para crear un círculo de competencia o fortalezas que te ayudarán a distinguirse en un mejor profesional.
Tres. Los amateur ven las observaciones y comentarios como una crítica personal, mientras que los profesionales saben que tienen puntos débiles y buscan críticas reflexivas. Si bien todos hemos experimentado ambos lados, lo cierto es que los novatos no quieren recibir observaciones de ningún tipo, mientras que los profesionales experimentados valoran cualquier tipo de opinión.
Cuatro. Los amateur se enfocan en identificar sus debilidades y mejorarlas, mientras que los profesionales se centran en identificar sus fortalezas y encontrar personas que sean fuertes en donde son débiles. El error radica en que las personas quieren ser buenas en todo, lo cual es imposible, por lo que un profesional buscará personas que lo puedan complementar y así ahorrará tiempo y energía.
Cinco. Los novatos se enfocar en derribar a otras personas, mientras los profesionales buscan mejorar a todos, aprender y ser ecuánimes en todo momento.
Seis. Mientras los amateur culpan a otros, los profesionales aceptan su responsabilidad, ya que aceptar tener miedo consiste en hacerse responsable de las consecuencias, lo cual puede traer problemas pero a largo plazo forma a un verdadero líder.
Siete. Los amateur suelen ser inseguros, temerosos de ser vulnerables y honestos consigo mismos, mientras los profesionales buscarán manejar casi cualquier circunstancia. El punto es la confianza, la cual aparecerá y desaparecerá a lo largo de cualquier trayectoria, además de honestidad de conocer los puntos fuertes y asumir la responsabilidad.
De acuerdo con analistas, la diferencia entre amateur y profesional radica en miedo y realidad, y aunque todos pueden experimentar sensaciones de ambos bandos, pero los segundos tendrás más criterio e integridad, mientras que los primeros parecerán aficionados poco profesionales.
