En los últimos años los casos de #Lords y #Ladys se han multiplicado en redes sociales. Pero, este tipo de sucesos, aunque en muchos casos se vuelven ‘virales’, no necesariamente son buenos para las marcas o instituciones que se ven involucradas; tal es el caso de #LadyPollos.
Así fue como se le nombró en redes sociales a la diputada plurinominal de Fresnillo, Zacatecas, Iris Aguirre Borrego, quien regaló pollos rostizados ‘para la cena de navidad’ con su fotografía en el empaque y compartió el hecho subiendo varias fotografías a su cuenta de Facebook.
“No hay nada más hermoso que compartir esta navidad con los que más lo necesitan! #TeAmoFresnillo”, escribió la legisladora en su perfil de la red social.
Al parecer, luego de la respuesta de la gente y que fue retomado en diversos medios de comunicación, la diputada eliminó las fotografías. No obstante, pueden ser vistas gracias al hashtag que usó #TeAmoFresnillo.
La diputada pretendía hacer una “buena” acción navideña, pero tuvo un resultado completamente opuesto. Primero porque los pollos llevan la fotografía de la diputada, algo que se interpreta de manera inmediata como proselitista.
Segundo, porquerecuerda aquellas prácticas que tienen los partidos políticos desde hace muchos años, en los que realizan obsequios o realizan campañas para ofrecer servicios a comunidades de escasos recursos pero siempre entregan productos u objetos con el logo, lema o fotografía del partido gobernante, adminstración, o político en turno. Algo que se supone es ayuda, pero en realidad busca hacer procelitismo político.
Tercero, porque Aguirre Borrego es legisladora por el Partido Encuentro Social, de corte conservador y, señalado por muchos como muy apegado a un pensamiento religioso -algo que constitucionalmente no debe estar ligado con la política-, por lo que las acciones de #LadyPollos afectan a la institución política.
El problema es que a la diputada no le han asesorado bien desde su partido o su cuerpo cercano de colaboradores pues, al parecer, le gusta estar en polémicas en redes sociales.
Diversos medios de comunicación recuerdan que Aguirre Borrego también ha sido protagonista de otras dos conversaciones -en su mayoría negativas- en Twitter, primero con #LadyTrump, cuando en 2016 a la diputada la pareció buena idea justificar las propuestas de Donald Trump (entonces presidente electo) relacionadas con deportaciones y políticas antimmigratorias.
Además, en noviembre pasado, algunos usuarios la llamaron #Ladymallas, debido a que publicó una imagen en la que obsequió mallas ciclónicas con un copy que decía: “En apoyo a nuestros hermanos Tepehuanos de la sierra de Valparaíso hemos otorgado malla para cercar y prevenir de esta manera que sigan entrando a violar a sus niñas”.
Insistimos, este tipo de acciones no sólo afectan la imagen del funcionario público o político que las ejecuta, sino a su partido político o institución pública que representan, en este caso Encuentro Social, debido a que la opinión e imagen en el público relacionará ambos actores.
En este nuevo caso de Aguirre Borrego, a diferencia de sus otras dos polémicas, podría tener un impacto indirecto en el precandidato presidencial por Morena y PT, Andrés Manuel López Obrador, pues fue hace sólo unos días que el tabasqueño también se registró como precandidato del Partido Encuentro Social.
Es decir, las acciones positivas y negativas que ejecuten todos los militantes y personajes relacionados con estos partidos tendrán un efecto indirecto (algunas incluso directo) en la imagen o percepción de las fuerzas políticas, en este caso de la coalición Juntos haremos historia, y su representante Andrés Manuel López Obrador.
Indudablemente ningún aspirante a la presidencia, partido o alianza política querrá estar relacionado con acciones de este tipo (#LadyPollos), pues la imagen del candidato o la plataforma política que quieren posicionar podría verse manchada. En este caso, la respuesta o llamado fue a que eliminaran la publicación, la conversación y atención de los medios no se pudo evitar.