Son al menos tres grandes empresas las que prometen inversiones o beneficios para sus planeados, luego que esta mañana fuera aprobada la polémica reforma fiscal.
Más tardó Donald Trump en celebrar con una conferencia desde la Sala Oval de la Casa Blanca el aval del Congreso por su cuestionada reforma fiscal que las macacas en reaccionar y dar la bienvenida al recorte de impuestos.
Una de ellas es AT&T que anunció esta tarde que repartirá entre sus más de 200 mil empleados en Estados Unidos un bono de mil dólares y una inversión de más de mil millones de dólares para 2018 si Trump firma la reforma antes de navidad.
“En reconocimiento a la votación de hoy del Senado de los Estados Unidos para aprobar la legislación fiscal, AT&T reitera su plan de invertir mil millones de dólares adicionales en los Estados Unidos en 2018 si el proyecto de ley se promulga”, dice una nota firmada por Randall Stephenson, presidente y CEO de AT&T.
La reacción no es la única, pero llama la atención debido a que la empresa con base en Texas está en medio de una disputa con el Departamento de Justicia por la adquisición de Time Warner que está siendo detenida por los reguladores antimonopolio.
Aunque esto pudiera ser interpretado como un guiño para aligerar la tensión y esperar un aval, lo cierto es que AT&T no es la única, hay otras grandes empresas que prometen acciones similares.
Entre ellas, Wells Fargo que promete un incremento del salario mínimo de sus trabajadores a 15 dólares la hora y 400 millones de dólares en donaciones para el próximo año. También Boeing señala que destinará hasta 300 millones en capacitación laboral, mejoras en instalaciones y donaciones. El CEO de la fabricante de aviones celebró la reforma fiscal.
La reforma es vendida como una política que motivará que las empresas estadounidenses inviertan su dinero en su propio país en lugar de llevarlas al exterior (caso Ford en México, por ejemplo), pero analistas ven esto como una oportunidad más que para incrementar la inversión local, como una ventana para poder pagar deuda y recomprar acciones con el objetivo de aumentar dividendos.
