Snap Inc. tiene un valor bursátil de US$ 17.580 millones y, con un valor por acción de US$ 14,60 está mucho más cerca de su nivel más bajo (US$ 11,28) que de su máximo (US$ 29,44) en un análisis de las últimas 52 semanas.
Cada acción de Twitter, en tanto, cotiza a US$ 21,09 y aunque no está lejos de su máximo para las últimas 52 semanas (US$ 22,48), ya vale menos que Snap: US$ 15.660 millones.
Ambas redes sociales tienen problemas para crecer, y las dos tienen un enemigo en común: Facebook. Entonces, ¿por qué no trabajar en equipo?
Así lo plantea Shira Ovide, ex reportera del Wall Street Journal que ahora es columnista de Bloomberg Gadfly. Para Shira, tener un enemigo común como Facebook “puede ser la base de una hermosa amistad” entre Snapchat y Twitter. “Deberían encontrar maneras de unir fuerzas para conectar sus productos y negocios a fin de superar sus debilidades”, dice Ovide en su artículo en Bloomberg Gadfly.
Para la especialista, por separado les va a ser muy difícil lograr tomar más de la porción que hoy tienen, si se entiende que, según eMarketer, Google y Facebook absorben dos tercios de los US$ 83 mil millones en publicidad que se venderá en 2017 en los Estados Unidos.
Videos
Los usuarios de Snapchat aman los videos y adoran que sean efímeros. Pero no a todos les pasa lo mismo. Las celebridades y grandes influencers necesitan que sus creaciones perduren más tiempo, de forma de poder monetizarlos.
“Imagine si Snapchat y Twitter colaboran en una opción de ‘compartir con Twitter’ dentro de la aplicación de Snap Inc. Luego, las organizaciones de medios y las celebridades de video digital podrían elegir parte de su trabajo para que sobreviva en Twitter luego de una exclusiva de un día en Snapchat”, analiza Ovide. Según la reportera, esa opción podría atraer a más celebridades de medios digitales o compañías de entretenimiento para que generen programas de Snapchat.
En ese mismo sentido opinaba hace unos meses Carissa Lintao, de The Next Web. En su artículo “Lo siendo Snapchat, es hora de decir adiós” hablaba de la imposibilidad de que las publicaciones trascendieran las historias de Snapchat. “Snapchat es para los amigos, pero Instagram es para el mundo”, analizaba.
Según Lintao, “hay muchos que tratan que las empresas lleven todo a Snapchat, específicamente como una forma de llegar a los millennials, pero ellos han desaparecido hace tiempo”.
Publicidad conjunta
“Lo que sugiero es que Snapchat y Twitter puedan poner en común algunos de sus espacios publicitarios y vender paquetes de anuncios que aparezcan tanto en Twitter como en Snapchat. Por ejemplo, a una empresa que intenta llegar a los hombres de veintitantos le encantaría comprar tiempo comercial en el próximo programa de videos de deportes de Twitter, más anuncios de compra que aparecerían a los hombres que usan Snapchat”, analiza Ovide en Bloomberg Gadlfy.
Completar agujeros geográficos
Twitter es casi omnipresente en el planeta. De hecho, el 80% de sus usuarios está repartidos por el mundo, fuera de los Estados Unidos. Snapchat, por el contrario, tiene al 43% de sus usuarios entre Estados Unidos y Canadá. “Si los programas de Snapchat aparecen en Twitter, podrían dar a conocer a Snapchat en gran parte del mundo donde su aplicación está ausente, sin la necesidad de que Snapchat gaste más para expandirse a nivel mundial”, dice Oliver.
Por otra parte, Twitter es una aplicación mucho más liviana, que funciona mejor en lugares donde Snap casi no tiene presencia porque Internet es muy limitada en gran parte del país, como India o Nigeria. Una sinergia entre ambas podría ser beneficiosa.
Según Oliver, trabajar en equipo en una coalición anti-Facebook no solucionará todos los problemas de Snapchat y Twitter, pero los caminos de ambas compañías comienzan a parecer “incómodamente familiares”. Vale la pena intentarlo.
