Hablar sobre el incidente de acoso sexual que Randi Zuckerberg sufrió a bordo de un vuelo de Alaska Airlines nos lleva a puntualizar la importancia de la salud al interior de una organización y el papel de las relaciones públicas.
El pasado mes de abril, cifras proyectadas por Brand Watch señalaron que United Airlines alcanzó más de 1.5 millones de menciones negativas en un solo día, luego de que un video se viralizara al mostrar cómo un pasajero había sido expulsado de manera violenta de un vuelo, porque alguien más había pagado por su asiento.
El Financial Times trascendió declaraciones de Andrew Charlton, un especialista en aviación, asegurando que la industria aérea tiene una tarea sumamente difícil al tener que decidir entre los ingresos que exigen las compañías y la atención que exigen los usuarios.
Acoso en contra de Randi Zuckerberg
El incidente ocurrió a bordo de un vuelo de Alaska Airlines que se dirigía de la Ciudad de Los Ángeles a Mazatlán. Durante el vuelo, la hermana de Mark Zuckerberg refiere que el hombre comenzó a tocarse de manera sugestiva, preguntarle si ella tenía fantasías sexuales y una serie de acciones que alertaron a Randi, sin embargo, la tripulación del vuelo le aseguró que se trataba de un viajero frecuente en esa ruta y que anteriormente ya le han pedido que se comportara.
“Estoy furiosa con Alaska Airlines por conocer y permitir que este hombre siga acosando a mujeres. Por conocer su comportamiento y estar más preocupados en tomar su dinero que en ofrecer seguridad al resto de los pasajeros”, cita el mensaje de Randi.
Tras la declaración lanzada por la creadora de Facebook Live, Alaska Airlines aseguró en un comunicado que la declaración de Zuckerberg era perturbadora y que mantenía cero tolerancia contra ese tipo de conducta.
La falta de comunicación entre los empleados de una compañía y la mesa ejecutiva de estas enormes empresas es una de las constantes fallas dentro de las organizaciones, a pesar de que se asume que los empleados son embajadores de marca, sin embargo, no están calificados para ello, debido a que las propias empresas no los califican para ello.
Feeling disgusted & degraded after an @AlaskaAir flight where the passenger next to me made repeated lewd sexual remarks. The flight attendants told me he was a frequent flier, brushed off his behavior & kept giving him drinks. I guess his $ means more than our safety? My letter: pic.twitter.com/xOkDpb0dYU
— Randi Zuckerberg (@randizuckerberg) 30 de noviembre de 2017