Llega de nuevo el Buen Fin y de bueno a veces no tiene nada, lamentablemente en México no tenemos la cultura del ahorro y de comparar precios, por lo tanto, el buen fin a veces en lugar de que los mexicanos hagamos compras inteligentes lo único que hacemos es endeudarnos más.
Este martes asistí a una conferencia que impartió Regina Reyes Heroles, periodista reconocida en el mundo de las finanzas, y comentaba datos alarmantes sobre el tema, según datos de la “Encuesta Nacional de la Inclusión Financiera (ENIF), 63.4 por ciento de los mexicanos acepta no tener un registro de ¿cuánto gasta?; de 36.6 que dice tenerlo, más de la mitad (63 por ciento) lo lleva mentalmente, por lo tanto, no lleva registro real y no le dedica tiempo a saber qué hacer con su dinero o a dónde se va este dinero”
El Buen Fin es una iniciativa que surge en noviembre del 2011 a propuesta del gobierno de la República y los comerciantes mexicanos, una buena iniciativa para impulsar la economía nacional, pero sin pensar en la realidad de los mexicanos.
Otros estudios nos muestran como por ejemplo “Ofertia que ofreció sus resultados del estudio realizado sobre los hábitos de consumo de los mexicanos, en el que descubrió que más del 81 por ciento de los mexicanos están esperando el Buen Fin para realizar sus compras” Por Jazmín Garibay Merca2.0 10-11-2017
Por lo tanto, ante estos datos esta semana quiero hacerles 5 recomendaciones que en lo personal llevo a cabo para en verdad aprovechar el Buen Fin.
- Hacerte la pregunta ¿En realidad lo necesito?
Lamentablemente para los consumidores y afortunadamente para los mercadólogos la publicidad que se lanza en el buen fin es muy atractiva y convincente, lo que hace es tratar de envolvernos como consumidores para comprar cosas sin que en realidad las necesitemos. Tenemos que hacer un alto y revisar bien si en verdad lo necesitamos o estamos haciendo una compra impulsiva.
- Compara precios antes del buen fin y en el buen fin.
Esta recomendación la llevo a cabo de manera personal y me di cuenta que en algunas de las tiendas los precios seguían igual solo que la etiqueta la cambiaban para que no se notara y hasta algunas tiendas recibieron demandas o reclamaciones ante la PROFECO por el abuso de las tiendas en algunos de estas acciones; no respetar promociones u ofertas, no respetar precios exhibidos, condicionar o negar la venta, información o publicidad engañosa y no exhibir precios entre otros.
- ¿Lo tengo presupuestado?
Como vemos en las estadísticas más de la mitad de los mexicanos no llevan un presupuesto familiar en forma, lo llevan en la mente y así es muy fácil olvidar compromisos adquiridos o deudas que hay que pagar y con la emoción del buen fin nos dejamos llevar y no consideramos estos aspectos.
- ¿Me puedo dar el lujo de comprarlo?
Si eres de la otra mitad de mexicanos que sí lleva un presupuesto mensual y además tiene ahorros, también es válido decir pues me puedo dar el lujo de comprarlo, porque lo necesito, ya comparé precios y es una buena oportunidad.
- ¿Estoy haciendo una compra emocional o racional?
También está comprobado que las emociones son parte fundamental de la toma de decisiones a la hora de comprar entonces por tal motivo es importante pausar y revisar muy bien la oferta que estamos analizando, entender mi entorno y poder entonces si tomar una decisión racional y no emocional.
Sinceramente deseo que este buen fin así lo sea espero que mis recomendaciones les ayuden para aprovecharlo al máximo.
¿Listos para el Buen Fin?