El diseño y venta de drones (o naves no tripuladas) cada vez ganan más presencia en el mercado, se vuelve común ver su implementación en acciones de marketing, pero también el número de personas que los usa como artículo de entretenimiento.
México no está exento de esta tendencia, incluso Uber implementó el uso de drones para hacer marketing en la CDMX el año pasado, también los hemos visto en espectáculos como festivales de música y deportes o usados por medios de comunicación en manifestaciones. La creciente popularidad de este tipo de aeronaves requiere que exista un marco que regule su uso en el país.
Esto es lo que buscan desde el Congreso mexicano, esta semana la Cámara de Diputados aprobó (397 votos a favor) reformas a la Ley de Aviación Civil, y de la Ley de Aeropuertos con la finalidad de establecer un reglamento de operación de las Aeronaves Pilotadas a Distancia (RPA) o drones.
El dictamen, que ahora pasó al Senado para sus efectos constitucionales, pretende facultar a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para establecer una “clasificación y particularidades de los sistemas de aeronaves pilotadas a distancia”, así como definir “usos y fines de los artefactos”, y “los requerimientos para otorgar autorizaciones y licencias”.
Para proteger la seguridad de todos, aprobamos #PorUnanimidad regular el uso de drones. Pasa al @senadomexicano pic.twitter.com/TV84INqgJ9
— Cámara de Diputados (@Mx_Diputados) 1 de noviembre de 2017
El intento de los legisladores mexicanos buscaría emular de alguna manera, la reglamentación pero también la apertura para el uso y desarrollo de drones que se impulsa en Estados Unidos. La administración de Donald Trump aprobó cambios para promover el uso de este tipo de aronaves en territorio estadounidense.
Si bien, este tipo de iniciativas buscaría establecer reglas y normas claras para que grandes firmas inviertan en el desarrollo e implementación (Intel, GoPro, Amazon, Google, AT&T y Apple, por ejemplo) y evitar que lleven sus inversiones a otros países. En el caso de México se deben atender ciertas particularidades.
De acuerdo con medios nacionales, uno de los argumentos por establecer un nuevo marco regulatorio para los drones es el crimen organizado y el posible uso de este tipo de dispositivos para fines criminales.
Es cierto que México adolece por la presencia de este tipo de delincuencia, pero no es la única, y tampoco el único factor que se debe considerar para legislar el uso de drenes.
El país tiene altos indices de inseguridad y una clara falta de cultura de respeto por la propiedad ajena, al incrementar su uso o presencia en el espacio aéreo, las empresas o marcas que decidan apostar por este tipo de acciones podrían poner en riesgo sus inversiones por la probabilidad de robo o destrucción (producto de agresiones), a esto hay que sumarle que un blanco fácil para el mercado negro de tecnología. La publicidad exterior excesiva e ilegal y la infraestructura urbana (cableado, luminarias, etc.) irregular también pueden ser un riesgo.