Ya conocemos múltiples formas en las que la mercadotecnia y publicidad se desenvuelve. Se puede pasar desde la estrategia más básica, utilizando medios tradicionales hasta la utilización de las plataformas digitales y redes sociales, que continúan como una tendencia actual para proyectarse como un modelo de negocio creciente.
Está de más explicar que el auge del mundo digital ha potenciado comercial y estratégicamente las posibilidades que ofrecen las tácticas de promoción, lo que hace de las redes sociales las principales plataformas por las que se puede ganar un segmento y mercado en particular.
De acuerdo a datos de Forbes, 95 por ciento de lo usuarios conectados a Internet utilizan alguna red social y ese impacto también tiene repercusiones en las empresas. Para ser más precisos sobre el dato anterior, un estimado de LinkedIn arroja un total de 19,456,833 millones de personas registradas en trabajos de Social Media Marketing y la tendencia va a la alza.
Es aquí donde entra el punto de la miopía del marketing, término acuñado por Theodore Levitt en la década de los sesenta el cual hizo referencia a la mala gestión de las marcas para hacer un modelo empresarial exitoso. Es decir, la mercadotecnia se concentra en responder a las necesidades del comprador y el consumidor, pero las empresas no se esfuerzan por atender el problema que tienen frente a ellos: los usuarios.
¿Cómo afecta tu estrategia de redes sociales?
- Confusión de las acciones qué se buscan en social media: En un inicio las redes sociales funcionaban como herramienta de difusión. Hoy, su declaración estratégica no debe limitarse a la promoción general. La interacción e inmediatez ayudará a generar compromiso con ellos en el entorno digital.
- Al no tomar en cuenta la satisfacción del cliente. Deben determinar y actuar según las necesidades y deseos de sus clientes, olvidándose de la supuesta longevidad de sus productos.
- Desconocer el público meta al que se dirigen. Tener una gran cantidad de seguidores en redes sociales no garantiza la posición en el mercado. Diversificarse para atraer a mayor cantidad de consumidores descuidará al consumidor principal para el que comenzaste a crear productos.
Las acciones digitales de una marca se incrementan en cuanto estas son novedosas, lo que permite llegar a la mayor cantidad de usuarios que comparten su propia visión, sobre todo cuando potencializan su esfuerzo de social media. Como resultado se generará mejor calidad al momento de dirigirse a la audiencia.