En el titular de esta nota cuestionamos qué lograría Victoria’s Secret de la ecuación tras aliare con Balmain, luego de que sitios como Seeking Alpha trascendieron cifras de L Brands, donde la compañía dueña de la marca de lencería, registra una depreciación de sus acciones en el mercado bursátil y las ventas en tienda registraron negativos en comparación con el año anterior inmediato.
La respuesta es que vender en colaboración se ha vuelto una norma con gran impacto a nivel internacional, debido a que los productos logran aterrizar con el consumidor masivo y los indicadores de ventas se mantienen girando, advirtiendo el poder del diseño y la capacidad de la creatividad.
Esto ha logrado que compañías de fast fashion colaboren con marcas de lujo para generar productos que llaman la atención del consumidor masivo, acostumbrado a los productos como perfumes, maquillajes, accesorios de baja gama, que se adaptan a su presupuesto y les permiten vivir la experiencia de marca.
Lo anterior ha convertido al retail en un canal con gran relevancia para la estrategia comercial del mercado de moda, pues no solo le permite trascender a las marcas de esta categoría, sino que se convierte en un canal adicional para las marcas de lujo, de lograr que su marca llegue a la mente de nuevos consumidores, permite la experiencia a los consumidores que ya conocen la marca pero no tienen el poder adquisitivo de comprar productos de alta gama que ofrece.
Es por ello que resulta relevante la colaboración entre victoria’s Secret y Balmain, una marca muy costosa, como parte de una colección que ambas firmas lanzarán y se promocionará en el tradicional desfile de la firma de lencería.
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