La firma Kaspersky Lab, es una de las principales compañías en servicios de seguridad informática, pero esto no le alcanza para conservar la confianza del gobierno de Estados Unidos que decidió eliminarlo de todas las oficinas federales.
En la era de la información y migración al mundo digital, así como a los dispositivos móviles, la seguridad y protección de información es clave para la buena reputación de una corporación o gobierno. Sólo durante 2016, se invirtieron aproximadamente 81 mil 600 millones de dólares en sistemas, productos y servicios de seguridad informática, según un reporte de la consultora Gartner.
Este es un factor que estuvo en tela de juicio en Estados Unidos, debido a que se relacionó a Kaspersky con supuestos ataques informáticos durante las campañas y elecciones presidenciales, así como de trabajar de manera cercana con la inteligencia rusa.
La compañía rusa negó en reiteradas ocasiones estar involucrada con este tipo de prácticas, pero al parecer esto no convenció a la administración de Donald Trump que, a través del Departamento de Seguridad Interna (DHS, por sus siglas en inglés) prohibió que todas las agencias gubernamentales usen en sus equipos de cómputo el software de la firma con sede en Moscú.
El DHS emitió una directiva a las agencias federales ordenándoles que identifiquen los productos de Kaspersky en sus sistemas informáticos en un plazo de 30 días y comiencen a suspender su uso dentro de 90 días.
La decisión del gobierno estadounidense, más que afectar económicamente a la firma de ciber seguridad rusa, le afectará en cuanto a imagen y reputación corporativa, pues aunque niega las acusaciones y afirma que “no hay ningún vínculo inapropiado con ningún gobierno” y que “no hay pruebas creíbles” para respaldar las “falsas acusaciones”. Al final, la confianza en la marca se verá afectada.
Cabe destacar que Kaspersky emprendió una serie de acciones para prevenir impactos de este tipo, una de ellas fue lanzar un software antivirus en versión gratuita en diversos mercados como Estados Unidos, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, entre otros, con el objetivo de reforzar la posición e imagen de la marca en los usuarios.
When politics use the news to shape facts, no one wins. Our response to DHS Binding Operational Directive 17-01 ⇒
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