La propagación de paquetes de exploits cambió el panorama de las amenazas cibernéticas durante el segundo trimestre de 2017, pues los usuarios atacados con este tipo de archivos ya suman 1.5 millones.
Esta cifra evidencia que el peligro va más allá de las pandemias como WanaCry, pues el promedio de estos ataques crece cada día con un aumento de 82 por ciento en los últimos 30 días, de acuerdo con un reporte de Kaspersky Lab.
Un exploit es un tipo de software malicioso que se aprovecha de los errores y vulnerabilidades de otros dispositivos para infectarlos con código malicioso.
Los ataques que se hacen con ayuda de exploits están entre los más eficaces, debido a que ocurren sin necesidad de alguna interacción con el usuario y pueden distribuir su código sin que éste se percate de ello.
De abril a junio pasados se experimentó una ola masiva de estas vulnerabilidades incontroladas, debido a una serie de exploits que se filtraron en la web, según Kaspersky Lab.
El cúmulo de ataques inició principalmente con la publicación del archivo “Lost In Translation”, hecha por el grupo Shadow Bróker, el cual contenía una gran cantidad de exploits para diferentes versiones de Windows, “lo que tuvo consecuencias desastrosas para las víctimas”.
“El panorama de las amenazas en el segundo trimestre proporciona otro recordatorio de que la falta de vigilancia es uno de los peligros cibernéticos más importantes”, señaló Alexander Linkin, experto en Seguridad de Kaspersky Lab.
Para evitar ser víctima y reducir los riesgos de infección, la firma recomendó mantener el software actualizado, elegir a un proveedor de software que se haga responsable ante una vulnerabilidad y comprobar si éste tiene algún programa de recompensas de errores.