Luego de anunciar en abril pasado que realizaría cambios ‘serios’ en YouTube, Google se había mantenido cauta respecto a estas nuevas políticas que, en teoría aplicarían para evitar la propagación de videos con mensajes de odio y contenidos extremistas.
Pero, parece que ya llegó el momento de hacerlas efectivas. La plataforma de videos comenzará a buscar los contenidos que contengan este tipo de mensajes para limitar su alcance. Si bien, parece que no los eliminará, sí mostrará páginas de advertencia, prohibirá la inserción de publicidad, inhabilitará los likes y comentarios y los sacará de la lista de los videos sugeridos.
Las nuevas políticas iniciaron esta semana, propiamente desde este jueves y, según reportes de medios como Bloomberg y The Independent, Google hará saber a los productores de estos videos sobre las restricciones a través de una notificación que les será enviada a través de correo electrónico.
YouTube es una de las plataformas de videos de mayor penetración, cuenta con más de mil millones de usuarios a nivel mundial y, según la plataforma, ingesta más de 400 horas de video por minuto.
Estas restricciones vienen después del problema que enfrentó Google respecto a la publicidad programática y los videos con mensajes de odio, algo que provocó el retiro de cientos de marcas. El problema se resolvió y con los meses la compañía comenzó a recuperar socios comerciales, pero con la promesa de emprender cambios profundos.
Ahora, de acuerdo con la información disponible, se hace notar que no se eliminarán los videos con este tipo de contenidos, pero YouTube sí los esconderá para limitar su alcance, que sean compartidos y ganar dinero con ellos.
Según analistas, no es casualidad que Google comience con estas nuevas restricciones, señalan el contexto social que vive Estados Unidos con una nueva creciente ola de manifestaciones de posturas extremistas.
Recordemos lo sucedido en Charlottesville, Virginia, a principios de este mes, motivó diversas formas de expresión de rechazo, desde políticos, personalidades del espectáculo y los deportes, así como varias compañías de tecnología, incluyendo la de Mountain View, Facebook y Airbnb Inc., entre otras.