El marketing de influencia, los contenidos y las acciones que se implementan en redes sociales han conformado un verdadero mercado, que basa su comunicación en la interacción social y en el valor de marcas personales.
Las marcas personales son una de las apuestas más grandes dentro de la mercadotecnia, pues el trabajo que se hace con estas personalidades ha sido contundente para alcanzar metas a favor de las marcas.
De hecho, las marcas que han entendido la importancia de las redes sociales mantienen equipos de community managers como responsables del monitoreo de la marca y su presencia dentro de la comunicación en dichas plataformas.
Ejemplo de este tipo de acciones ocurre luego de que la cantante Beyoncé anunció su gira vistiendo una sudadera de Fila.
La acción, que pareció ser una casualidad, fue replicada por la marca en su cuenta de Instagram, en donde promovió la venta de su prenda:
Beyoncé spotted wearing FILA? pic.twitter.com/IfugNfGp1h
— Outlander (@StreetFashion01) 10 de agosto de 2017
Ejecutar estrategias comerciales en redes sociales supone mayor capacidad para las marcas de generar respuesta por parte de las audiencias, que recurren a estos canales como una nueva forma de vivir su experiencia no solo de demanda de contenidos, sino en punto de venta, donde ha sido determinante la acción de la mano de herramientas digitales y reconocimiento de insights, que ayudan al ajuste de las estrategias que se dirijan de manera personal con cada uno de los consumidores con base en su perfil.
Un dato que nos ayuda a entender el marketing de influencia nos habla del perfil del influencer: según un estudio conducido por la firma Pysche, 82 por ciento de las personas encuestadas piensa que los blogueros de moda serán más influyentes que las revistas de este nicho.
Un segundo dato es ofrecido por eConsultancy donde se advierte que los anunciantes recurren a estrategias publicitarias basadas en personas reales, para branding (33 por ciento) y generar lealtad y retención de clientes (31 por ciento).
Como tercer dato tenemos que la conexión emocional con el consumidor se logra a través de estrategias que se dan de forma natural con el influencer cuando este recurre a sus historias personales. Este es el factor número uno para que las recomendaciones a través de redes sociales sean efectivas.
