La relación entre Apple y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump ha cambiado radicalmente. Hay que recordar que Trump pidió un boicot a los productos de la compañía de fundada por Steve Jobs mientras estaba en campaña electoral. Fue cuando Apple se negó a desbloquear el teléfono involucrado en los disparos de San Bernardino, en 2016.
Sin embargo, en marzo de este año Dan Scavino, el responsable de las redes sociales del Primer Mandatario, confirmó que Trump comenzó a utilizar un nuevo teléfono móvil. De hecho, aseguró que llevaba dos semanas con su “nuevo iPhone” y que ya lo usaba habitualmente para escribir en Twitter.
Ahora, el titular de la Casa Blanca declaró en entrevista con The Wall Street Journal que la Gigante de Cupertino le prometió abrir más plantas en Estados Unidos, específicamente se refirió a Tim Cook.
Hablé con Tim Cook, y prometió tres fábricas — grandes, grandes, grandes
Esto, como resultado a una supuesta presión que el mandatario ejerció en el empresario:
Le dije, Tim, a menos que empieces a edificar fábricas en este país, no consideraré mi administración un éxito económico. Él me llamó, y dijo que las fábricas serán construidas
Esto podría ser verdad, ya que Trump dio muestra de su habilidad para generar inversiones en su país, cuando logró que Ford este invirtiera mil 200 millones de dólares en su planta de ensamble de Michigan.
No sería extraño que Apple cediera a las presiones y ampliara sus operaciones en la nación de las barras y las estrellas, aunque esto impacte en la imagen que algunos consumidores tienen de la compañía.