Con más de 700 millones de usuarios y 400 millones de ellos activos que revisan sus perfiles de Instagram todos los días, y la plataforma espera llegar a los mil millones de usuarios antes de 2018, pues en un año creció 50 por ciento, lo que la convierte en una parada obligada para cualquier marca.

Según Forrester, Instagram tiene una tasa de engagement como red social de 4.21 por ciento. Sus crecimientos se explican porque sus anuncios, fotografías y videos son cortos, creativos e ignorados en pocas ocasiones por los cibernautas.

Las desventajas de los streaming o video historias de Instagram es que solo duran horas para después desaparecer, sin embargo, las cuentas empresariales e incluso perfiles personales tienen acceso a una nueva función llamada “Live Replays”, la cual permite crear videos para reproducir y ver posteriormente las repeticiones.

Para guardar un video en vivo, las marcas deben seguir los siguientes pasos:

Uno. Al finalizar el video en vivo se debe finalizar oficialmente desde la esquina superior derecha del visor y posteriormente en la pantalla emergente, pulsar la función.

Dos. Para publicar el video en reproducción aparecerá una pantalla de “recap screen” o recapitulación y observarás cuántos espectadores tuviste. Posteriormente podrás seleccionar la opción de compartir durante las próximas 24 horas, mediante un deslizados que tendrá una opción azul de encendido. Después de eso, el video desaparecerá.

Tres. Después de la reproducción, la foto de tu perfil promoverá que tengas una opción de reproducción disponible, como un círculo alrededor, por lo que cuando los seguidores vean la lista de historias en la parte superior de su feed también verán el círculo de color rojo. Concretamente, si no tienes otra entrada de historia, solo la opción de reproducción de video estará disponible para los seguidores de la marca.

Cuatro. Al notar la repetición desde la foto de perfil, todos los comentarios originales aparecerán en la reproducción, solo que ahora los consumidores podrán acelerar el video tocando la pantalla.

Los streaming son unas oportunidades para que las marcas se conecten con sus audiencias, pero la desaparición del contenido puede provocar que no todos lo hayan visto. El alcance extendido garantizará más espectadores para la marca.