La identidad de marca es uno de los elementos definitivos para una marca, debido al impacto comercial que tiene para estas compañías.
A través del valor de la imagen de estas compañías, las marcas logran generar un impacto definitivo para identificarse con consumidores a través de estrategias comerciales y con audiencias, a través de historias.
En ambas estrategias resulta fundamental la imagen con la que cuentan las marcas, su identidad es una forma de generar reconocimiento ante las audiencias y experiencia.
Disney ha logrado construir una identidad con base en la experiencia de sus dibujos animados, por ejemplo.
Otra marca que ha logrado una identidad en su experiencia es Red Bull, una bebida energética que logró comunicar los valores de su producto a través de contenidos virales en los que puede lanzar a un hombre en un salto desde el espacio o generar competencias a través de motocicletas.
En medio de este panorama, resulta interesante ver el reciente enfrentamiento legal, reportado por diversos medios especializados, entre Gucci y Forever 21.
De acuerdo a los trascendidos, la marca de fast fashion demandó a la firma de lujo para poder usar las cintas azules con rojo que han sido parte de la identidad de la marca italiana, luego de que lanzó prendas que llevaban este diseño, lo que provocó el rechazo de la marca de lujo.
@gucci sues @Forever21 for copying it's trademark red and blue striped pattern onto its chokers and bomber jackets pic.twitter.com/zk5EOvUEYS
— Fashion Most Wanted (@FMWdotcom) 6 de julio de 2017
Forever 21 ha protagonizado diversas polémicas por copiar diseños ajenos. La compañía de retail fue señalada por una diseñadora, por copiar su bolso con un precio de 99 dólares (mil 930, aprox.) y ofrecer un diseño similar con un precio de 28 dólares (546 pesos, aprox.).
Forest Bound es la diseñadora que a través de su cuenta de Instagram dio cuenta de la copia a su diseño, además de informar que gracias al apoyo que recibió con comentarios y compartiendo el hecho, la marca de retail retiró el bolso de su sitio web.
A este caso se sumó el de Charles Smith II, un diseñador tejano que se lanzó en contra de Forever 21, cuando descubrió que la cadena de fashion retail copió la idea creativa de uno de sus productos en los que se lee “Do not touch”.