Pensar en los 20 años que han pasado desde que Harry Potter comenzó a publicarse, nos lleva a descubrir que el contenido como estrategia comercial, se ha determinado ante audiencias y dentro de mercados, de una forma cada vez más determinada, por la demanda de las audiencias y su apuesta por lograr experiencias a partir de historias.
Las historias y discursos han dado forma a los contenidos como un recurso que determina en mayor proporción el éxito de las marcas, en una apuesta por lograr comunicarse a través de formas sumamente creativas.
Esto último puede ser ejemplificado con marcas como Burberry, que se decidió a contar la historia de su fundador, como recurso para generar empatía ante las audiencias y en un concepto llamado fashion film, que ha sido retomado por diversas marcas.
Si bien el contenido se ha convertido en un formato sumamente exitoso dentro de la mercadotecnia, veamos ahora este fenómeno desde la perspectiva editorial con productos como Harry Potter, un cuento que se ha establecido como el gran referente en la oportunidad que brindan los contenidos a través de diversas estrategias que lo comercializan.
20 years ago today a world that I had lived in alone was suddenly open to others. It's been wonderful. Thank you.#HarryPotter20
— J.K. Rowling (@jk_rowling) 26 de junio de 2017
Basta con ver el éxito que ha logrado en ventas por producto, según cifras del Statistic Brain Research Institute.
Los números proyectados por este organismo advierten que por libros se han generado por ingresos de siete mil 743 mdd, mientras que por juguetes, los ingresos alcanzan los siete mil 308 mdd.
Respecto a lo que se h generado mediante películas en formato DVD o digital, los ingresos fueron de mil 978 mdd. En cuanto a renta de películas, la cifra se dispara hasta los 607 mdd; mientras que por venta de boletos de cine los ingresos no decepcionaron: siete mil 216 mdd.
A 20 años de haberse publicado el primer tomo de Harry Potter, la historia se ha convertido en una interesante estrategia de comercialización a partir de personajes que han marcado una pauta definitiva en el mercado de medios, al demostrar la importancia del merchandising a partir del marketing de nostalgia, por ejemplo, lo que ha determinado en mucho, el papel de las historias, en una apuesta donde los personajes son los grandes protagonistas de las estrategias que la mercadotecnia se encarga de diseñar.