Por más que los números digan que eres exitoso, nunca debes dormirte en los laureles. Es por esto que es inteligente lo que decidió hacer Badoo, que a pesar de contar con 340 millones de usuarios en todo el mundo, avanzó en un rediseño completo de la app y de toda su imagen corporativa.
Con la idea de mostrar que sigue siendo joven (a pesar de haber pasado los 10 años de vida) y para contrarrestar el avance de sus competidores (con Tinder a la cabeza), Badoo decidió un rebranding.
El principal cambio en la imagen de marca es el agregado de un corazón naranja, que funciona como icono de app y avatar en redes sociales. Esa especie de “Me Gusta” no existía en el logo anterior. Sólo el naranja (Pantone 165c) era parte de la palabra “Badoo”, en la segunda “o”.
Otra modificación es el tamaño de las letras. Hasta antes del rebranding, las cinco letras de Badoo tenían tamaños diferentes, y hasta colores distintos. Ahora, como un símbolo de madurez, todas se igualaron en color y magnitud.
Puedes descargar el manual de uso de la marca (PDF).
“La nueva tipografía corporativa, llamada Stolzl, reafirma esta intención de limpieza y circularidad de toda la identidad, con caracteres muy geométricos y gruesos”, dice Modesto García en Brandemia.
“Con esa evolución, Badoo da un salto generacional importante, viajando desde la era de las webs de citas a la era de las apps con geolocalización”, agrega el medio.
Lo que se le critica al nuevo logo es la falta de personalidad del corazón naranja. Es demasiado “común”, sin ningún elemento que lo distinga de las decenas de corazones que abundan en las aplicaciones de estos días. Hay que ver que potente sigue siendo la marca “Badoo” como para potenciar y atraer para sí un ícono tan trillado.
El rebranding estuvo liderado por Sasha Grishin, Senior Product Designer en Badoo.