En 2016, el rotativo estadounidense, The Washington Post, superó a sus competidores, como The Wall Street Journal y The New York Times, al lograr 100 millones de visitantes, solo en Estados Unidos, así como otros 30 millones en el resto del mundo, lo cual representó un aumento del 50 por ciento, respecto a 2015.
Desde que fue adquirido por el multimillonario y dueño de Amazon, Jeff Bezos, el diario creció su publicidad digital en 40 por ciento, mientras que las suscripciones digitales crecieron 75 por ciento, según cifras de sus editores. Pese a las cifras positivas, el The Post decidió hacer nuevos cambios.
El diario se despidió de varios servidores publicitarios, creadores de anuncios, así como proveedores de anuncios nativos y de video con los que trabajaban, lo cual es un esfuerzo para acelerar el ingreso y salida de la publicidad como medida para disminuir su dependencia.
De acuerdo con el jefe de publicidad del diario, Jarrod Dicker, la herramienta de seguimiento, Ghostery, muestra que The Post ha sido capaz de reducir su dependencia de los proveedores debido a que su equipo interno de desarrollo de productos crece otros productos que utiliza en lugar de terceros, ya que después de que en 2016 creciera el equipo en 10 miembros, autorizó sus productos publicitarios a 110 empresas.
Para atraer a anunciantes a gran escala, la compañía se asoció con un vendedor de anuncios llamado Domo, el cual funciona como un mediador que atrae a otros anunciantes, ya que funciona como un rastreador de vendedores, el cual ha rastreado hasta el 80 por ciento de la publicidad del The Post, en tanto que éste crea nuevos productos publicitarios que diseñan los editores.