Para quienes son amantes de los felinos (y para los que no) esta acción resultará innegablemente inteligente por el efecto logrado. Especialmente porque la organización Etobicoke Humane Society ubicada en Ontario, Canadá, ha agradecido a Ikea de una forma más que efectiva al mostrar en imágenes que ya los gatos de ese refugio no dormirán en el “suelo frío y duro”, como sucedía hasta ahora.
La empresa sueca de muebles y decoración ha donado 10 camas de muñecas y 300 dólares a la organización que vela por estos gatos abandonados, y es que aunque Ikea no fabrica muebles para mascotas, muchos consumidores descubrieron que el tamaño era perfecto para éstas, a lo que le ha sacado provecho la compañía.
A la iniciativa de Ikea se suma el que Etobicoke Humane Society ha mostrado en redes y en YouTube, los resultados de la donación, con frases como “Nuestros pisos son fáciles de limpiar, pero no demasiado confortables para acostarse. Ahora gatos como Catsby y Frankie tienen camas para poder acurrucarse en ellas.”
Y he aquí la demostración:
