Después de terminar su mandato como presidente de Estados Unidos, Barack Obama desapareció de los radares públicos, sin embargo, se reveló que el ex presidente acudirá a Alemania, donde participará en un evento para después sostener un panel con la canciller alemana, Angela Merkel.
El próximo viaje del ex presidente Obama será el 25 de mayo, para las celebraciones del 500 aniversario de la Reforma Protestante, y después aparecerá junto a la canciller alemana, Angela Merkel, en un panel denominado “Estar involucrado en la democracia: responsabilizarse local y globalmente”, el cual se hará frente a la Puerta de Brandenburgo, un símbolo de la unidad europea.
Analistas creen que Obama eligió Alemania porque es un país donde es muy apreciado, además de que cultivó una relación de amistad con la canciller alemana, incluso en alguna ocasión siendo presidente dijo “si yo fuera alemán y tuviera un voto, la apoyaría”.
Mientras tanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llegará a Bruselas el mismo día para una cumbre de dirigentes de la OTAN, donde se prevé que reafirme su compromiso con la alianza y recordar que los países miembro cumplan con su obligación de cubrir con un 2 por ciento los gastos para la organización.
Además, cuando Trump se reunió con Merkel, además de negarle el saludo e ignorarla, comentó horas después en su cuenta de Twitter que “Alemania debía grandes sumas de dinero a la OTAN”. La Casa Blanca después aclaró lo que el presidente quiso decir, mientras que la primera visita de Trump a Alemania será en julio, donde asistirá a la reunión de líderes del G20, en Hamburgo.
El ex presidente Obama cultivó buenas relaciones con personajes políticos de todo el mundo y pueblos enteros, que según especialistas, se trató de una estrategia de marketing político mientras era presidente, pero ahora es personal branding, ya que se prevé que Obama comience a asistir por todo el mundo dando conferencias, las cuales tendrían un lleno absoluto, debido a que casi todo el mundo lo reconoce y aprecia.