Las razones para cambiar de teléfono móvil puede ser numerosas, pero más allá de las obvias, como pueden ser su pérdida o los fallos técnicos que le dejen fuera de funcionamiento, se encuentra también la necesidad de renovarlo ante la salida de nuevos modelos o el dejarse presionar por la obsolescencia programada. Sea cual sea la razón, los usuarios parecen no esperar ni dos años para cambiar de dispositivo.
Los datos de Kantar Worldpanel lo dejan claro, en el caso de España, son 20,5 meses lo que tarda un usuario de media para pasar de un smartphone a otro, siendo el segundo país donde menos tiempo se tardan los consumidores en hacerlo, por detrás de los Alemanes, que se deshacen de su teléfono móvil, en 20,3 meses de media.
El ranking se ha elaborado con información sobre los usuarios en los países de la UE, donde, como se muestra a continuación, las diferencias no son abismales… y el tiempo es realmente corto, a pesar del coste que puede suponer para muchos, realizar esta sustitución.