La cadena sueca de farmacias Apotek Hjartat buscó la forma de motivar a los fumadores a dejar ese mal hábito, como resolución de año nuevo, así que para ello instaló carteles interactivos de los más innovadores… si se les acerca un fumador, la imagen comienza a toser.
Estos posters, que contaban con detectores de humo de cigarro, se activaban para luego de la tos, dar pie a la recomendación de los productos de sustitución de la nicotina que se venden en estos establecimientos.
Este tipo de iniciativas en las que los carteles de exterior reaccionan a una condición especifica, están creando tendencia gracias a las posibilidades que ofrece la tecnología. Por ejemplo en Madrid, se ha propuesto un proyecto, pero para vallas de mayor tamaño en las que tose un pequeño, pero para anunciar el nivel de contaminación existente.
En el caso de los citados mupis, se trata de un nuevo trabajo que la agencia Akestam Holst ha realizado para la cadena de farmacias, después del éxito del cartel instalado en el metro, en el cual el pelo de la modelo se movía con la llegada de los trenes y que le ha valido numerosos galardones internacionales.