En otros tiempos el marketing se realizaba de distinta forma, se manejaba de forma más invasiva, mandándole a personas que ni siquiera eran parte del target ofertas, promociones y publicidad, que al final sólo lograba que aquella que era digital siempre terminara en la papelera de reciclaje.
Mensajes como directos en donde te ordenaban que hacer eran muy comunes de parte de las empresas que ya contaban con renombre, valiéndose de un nuevo canal para poder acaparar la atención de la audiencia en general. Cuando se dieron cuenta que el 21 por ciento de las personas que recibía un mail de su parte e inmediatamente lo borraba, cambiaron la estrategia.
Vieron que el tener cientos de seguidores en redes de sociales que no participaban en ninguna de sus actividades interactiva se preocuparon aún más y decidieron hacer un plan de fidelización, quedándose sólo con aquellos que cuestionaban, hacían observaciones constructivas y los incluían entre sus favoritos.
Actualmente el target ya no quiere que le digan qué hacer, más bien lo que busca son soluciones que le agreguen valor a su existencia, si has intentado hacer todo lo posible para tener mejor presencia digital y tus ventas no suben, debes de medir la lealtad de tus clientes, tal vez llegó alguien de la competencia y les ofreció algo con calidad más alta.
Es momento de cambiar el chip, para logarlo requieres algo más que dinero; la creatividad en estos casos un arma letal para el consumidor, si además de ofrecerle un buen producto le brindas contenidos que aporten seguramente lograrás que te sea lean por un buen rato.
Para llevar a cabo esta estrategia tienes que utilizar todos los canales que tienes a tu alrededor, con esto harás que todo el mundo se enteren de lo que se están perdiendo, incluyendo algún valor agregado que les resulte irresistible.