Se confirma lo que la propia compañía japonesa anticipó el día de ayer al anunciar que podría sufrir un deterioro multimillonario de activos relacionado con una adquisición en el sector de la energía nuclear en Estados Unidos. Hoy, sus acciones se desplomaron 20.43 por ciento en la Bolsa de Valores de Tokyo.
Todo se debe a que Toshiba informó el martes que podría registrar una pérdida por sobrecostos en el negocio nuclear CB&I Stone & Webster, que compró a Chicago Bridge & Iron el año pasado, y que podría tener un impacto en gastos por “varios miles de millones de dólares”, de acuerdo con Reuters.
El impacto se hizo efectivo este miércoles, las acciones del conglomerado japonés -que no pasa por su mejore época- se desplomaron más de 20 por ciento, al cerrar con un valor de 311,6 yenes (2,59 dólares) frente a los 391,6 yenes (3,32 dólares) en los que cerró el martes. Esta caída representa una pérdida de valor de mercado por un monto cercano a los 5 mil millones de dólares.
Toshiba es una compañía japonesa fundada en 1875 y, pese a tener tanto tiempo en el mercado, actualmente no pasa por su mejor etapa, de hecho, se ha especulado -hace tiempo- que la marca conocida por sus televisores, laptops y DVD’s podría caer en banca rota.
Todo tuvo su origen en 2015 cuando un escándalo financiero provocado por manipulación de activos provocó la renuncia de Hisao Tanaka, su CEO en aquel entonces. Esto se extendió con el cierre de su división de electrónica de consumo (incluyendo televisiones), así como la eliminación de 7 mil empleos.
De acuerdo con EFE, tras lo ocurrido este miércoles, Toshiba analiza la posibilidad de solicitar una ampliación de capital si las pérdidas dañan su situación financiera, en cuyo caso buscará apoyo entre sus principales prestamistas.
Por su parte, S&P advierte que la capacidad de la compañía japonesa “de mejorar el retorno para sus accionistas probablemente siga siendo difícil en el futuro”, concluyendo que en sus proyecciones ve “condiciones de negocios persistentemente difíciles”.
En tanto, Masahiko Ishino, analista del Tokai Tokyo Research Center, citado por Fortune, señala que el foco podría cambiar pronto si Toshiba decide desprenderse de algunos de sus negocios. “Habrá muchas empresas que quieren comprar sus negocios”, dijo Ishino.
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