El consumo de café es uno de los indicios de consumo más representativos en mercadotecnia al tratarse de una industria donde marcas de cafeterías como Starbucks obtuvieron ingresos de 21 mil 95 millones de dólares durante 2015, según Euromonitor.

Ante un mercado tan prolífico, las estrategias de mercadotecnia están apostando por un consumidor con un perfil móvil quien encuentra en la interacción digital con las marcas, una oportunidad de generar un engagement, por lo que estrategias como la mercadotecnia digital se fortalecen con inversiones, que según estimados de 2015 alcanzaron a nivel mundial los 200.8 mil millones de dólares, según TechNavio.

A pesar de este perfil digital que la industria del café encuentra cada vez más importante en sus estrategias, el mercado no se ha olvidado de estrategias de mercadotecnia de promoción, lanzamiento y fidelidad, por lo que es importante conocer al consumidor a partir de las cifras que nos hablan de la demanda de café, sobre todo en un país donde el café instantáneo, por ejemplo, podría alcanzar ventas con un valor de 564 millones de dólares este 2016, según Statista e INEGI.

Datos del Departamento de Investigación de Merca2.0 explican que la mayoría de los consumidores encuestados reportó que consume un promedio de dos tazas de café contra un extremo en el que 6.7 por ciento consume más de cinco tazas de café.

Los patrones de consumo de café son un importante indicador que nos ayudan a entender el mercado, en el que resulta interesante comprenderlo por el número de tazas de café que consume, pues en esa medida se sabe en que segmentos se pueden implementar estrategias para seguir motivando el consumo o encontrar alternativas de comercialización en las que la venta de té o productos como comida se convierten en opciones que están detonando en el mercado cada vez más, que incluso motivaron que cadenas como Starbucks comercializara bebidas Teavana, marca de tés que adquirió en una apuesta que la esta llevando a ampliar la experiencia de marca a nuevos productos que hacen de visitar una cafetería, una experiencia que en algunos casos, poco tiene que ver con consumir café.