Un nuevo golpe es dado a la campaña de Hillary Clinton luego de que Wikileaks filtró dos mil correos de su jefe de campaña, John Podesta.
El incidente ocurre luego de que la campaña de Clinton ha enfrentado una serie de polémicas como su diagnóstico de neumonía, padecimiento que dio una pausa en su carrera por la presidencia de Estados Unidos.
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RELEASE: The Podesta Emails #HillaryClinton #Podesta #imWithHer https://t.co/pjX9tmfINt pic.twitter.com/kDTVFYHih7
— WikiLeaks (@wikileaks) 7 de octubre de 2016
RELEASE: the first 2050 of well over 50000 emails from Clinton Campaign Chairman John Podesta https://t.co/rpK9rbJ8ah #Podesta #imWithHer
— WikiLeaks (@wikileaks) 7 de octubre de 2016
Hillary Clinton, eyes downcast, stammering: If I talked about droning Julian #Assange, “it would have been a joke.” pic.twitter.com/MnALounJo0
— WikiLeaks (@wikileaks) 4 de octubre de 2016
Anteriormente la demócrata se había mantenido alejada de la prensa y de actividades de campaña como acudir al estado de Luisiana, donde el republicano Donald Trump realizó actividades de campaña al entregar víveres como parte de su ayuda tras la inundaciones registradas en el estado.
#WheresHillary? Sleeping!!!!!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) 20 de agosto de 2016
Otro de los incidentes en la campaña de Clinton ocurrió durante un discurso donde la candidata se refirió a los seguidores de Trump como racistas e islamofóbicos.
Entre las estrategias de mercadotecnia política que Clinton ha tenido que ejecutar ante este tipo de incidentes están su aparición en un programa late night donde abrió una frasco de pepinillos, para demostrar la calidad en su estado de salud.
Otra de las estrategias que ha tenido que emplear ocurrió cuando se pronunció a través de un comunicado en sus redes sociales, donde se disculpó al generalizar a los seguidores de Trump como personas intolerantes.
Una tercer estrategia aprovechada por la demócrata ocurrió con la presentación de su avión en el que viaja acompañada de la prensa que cubre sus actos de campaña, hecho que representó una inversión en RP gracias a que el incidente fue cubierto por la prensa nacional e internacionalmente.
At one point, Clinton wouldn’t even let reporters see her board the plane — Now she is letting them to ride with her pic.twitter.com/70TsSzSI4T
— Charlie Spiering (@charliespiering) 5 de septiembre de 2016