España. Como ya ocurriera con las bombillas incandescentes en el año 2012, a partir de hoy, los fabricantes de iluminación de España no van a poder comercializar focos halógenos. Una decisión que ha sido propuesta por la Unión Europea, que ha prohibido su uso con la vista puesta en el desarrollo de las tecnologías más eficientes, como las bombillas de LED que, aún hoy en día, suponen ya el 50% de las ventas.
Pero, que no cunda el pánico, ya que la medida va a afectar, en principio a los focos halógenos de las tiendas, ya que las bombillas que se emplean en viviendas podrán seguir vendiéndose hasta el año 2018. Eso sí, no serán muchas las empresas que tendrán que cambiar su tipo de iluminación, ya que la mayor parte de las empresas españolas ya se han cambiado al LED, una tecnología mucho más eficiente.
Lo que está claro es que, en estos momentos, la principal alternativa a los focos halógenos es el LED, el cual es muy beneficioso para los consumidores, ya que este tipo de bombillas, pueden suponer un ahorro de hasta el 80% de la electricidad. Además, también cuenta con una duración aproximada de 30 mil horas, que es más de tres veces superior a la de una bombilla estándar. Aunque, eso sí, algo malo tenía que tener el LED y es que aún es una tecnología más cara, aunque compensa al final de mes en la factura de la luz.
Otra de las alternativas son las bombillas de bajo consumo, aunque lo cierto es que, en comparación con el LED, tardan más tiempo en emitir su máximo de luz y, además, cuentan con un elemento químico muy contaminado y que debe ser reciclado continuamente: el mercurio.
Gracias a esta medida, la Comisión Europea, espera que los hogares, con las instalaciones más eficientes de iluminación lleguen a ahorrar unos 115 euros de media durante la vida de uso de las bombillas, algo que, sin duda alguna, los consumidores van a agradecer enormemente.
