El candidato presidencial republicano, Donald Trump, comunicó este viernes que su jefe de campaña, Paul Manafort, renunció a su cargo, y es que está siendo investigado en Ucrania por un caso de corrupción.
Y es que presuntamente el buró nacional anticorrupción investiga a Manafort por tráfico de influencias, pues apareció en una bitácora a mano con talonario de pagos ocultos del presidente Viktor Yanukovich.
El exfuncionario de Trump no quiere ser un distractor que afecte en la campaña de Trump, por lo que se retiró y el empresario aceptó la renuncia, alabando su profesionalismo.
#BREAKING: Donald Trump campaign chair Paul Manafort resigns https://t.co/mqTu3Dej0G pic.twitter.com/G0PwWgeNvZ
— New York Daily News (@NYDailyNews) 19 de agosto de 2016
Se trata de la segunda renuncia de alto perfil de la campaña del magnate, pues recientemente el director de campaña Corey Lewandowski también “abandonó el barco” a principios de junio.
Este anuncio llega después de que Trump lanzó su primer anuncio de televisión con una inversión de 4 millones de dólares, que representa un paso importante para la campaña del magnate visto desde la perspectiva publicitaria, pues su campaña se distinguió hasta ahora por ausencia de ejecuciones publicitarias en medios masivos de comunicación, lo que contrasta con la enorme inversión que su opositora, la candidata demócrata Hillary Clinton ha hecho en este tema.
En este sentido, son notorios los cambios en personal y estrategia del candidato después de una caída en las encuestas, que probablemente buscaría cerrar con fuerza su postulación, ya que las elecciones están próximas, pues se realizarán el 8 de noviembre.
Se puede ver la intención de reposicionarse, también en el nombramiento de Steve Bannon como nuevo jefe de campaña, pues se trata de un personaje calificado como “el agente más peligroso de la política americana”, por la revista Bloomberg Business Week.