El licensing es un acuerdo en el que un licenciatario alquila los derechos de una propiedad intelectual, legalmente protegida, a una persona o entidad, el dueño o representante de dicha propiedad (licenciante) para ser utilizada en conjunto con un producto o servicio.
Se usa principalmente cuando una marca no es lo bastante robusta para sustentar las ventas de sus productos o como método para atraer más clientes a una marca, por medio de la adquisición de licencias que permitan al producto incorporar características de otra.
Se trata de un ganar-ganar para el licenciatario y el licenciante, principalmente reflejado en distintos beneficios:
Calidad. De acuerdo con lo plasmado por María del Carmen Rotter, en “Los 10 mandamientos del licensing”, los usuarios tendrían una alta percepción de calidad e innovación del producto en el mercado.
Asociación de marca. Reflejaría los beneficios de grupo con otras marcas, volumen en incluso precio.
Punto de Venta. Estos productos gozan de una clara diferenciación en el punto de venta, comparado con la competencia y en la mente del consumidor.
Valor. La Asociación Mexicana de Promoción y Licenciamiento de Marcas (Promarca) reveló que las ventas de productos licenciados en México alcanzará los mil 900 millones de dólares, aún cuando dichas mercancías no superan el 2 por ciento de las ventas totales en retail.