Cinco familias que perdieron a sus seres queridos a causa de ataques palestinos, demandaron a Facebook por colaborar supuestamente con la violencia que ejerce el grupo terrorista Hamas.
Y es que solicitan mil millones de dólares en compensación porque la red social brinda una plataforma para que los militantes propaguen violencia, recluten terroristas, recauden fondos, y realicen ataques.
La red social fundada por Mark Zuckerberg, emitió un comunicado en el que dice que en Facebook no hay lugar para contenido que incite a la violencia, para amenazas directas, terrorismo o discursos de odio.
Sin embargo, la red social también enfrenta otra querella. Hace pocos días se dio a conocer que el Servicio de Impuestos Internos de Estados Unidos (IRS, por sus siglas en inglés), investiga a la plataforma por sospecha de que la compañía transfirió activos clave de su negocio a su sede en Irlanda con la finalidad de pagar menos impuestos.
Según información de Reuters, el Departamento de Justicia presentó una demanda ante un juzgado federal de San Francisco apelando a esta investigación con la finalidad de obligar a que la empresa dé la documentación para confirmar o descartar dichas suposiciones.
La situación se puede tornar en un problema para la marca al afectar la imagen de la red social, tal como en los casos de empresas como Google, cuyas oficinas en España fueron cateadas por las autoridades. En este sentido, Apple ha enfrentado procesos similares en Europa.
