Si Facebook enfrenta un reto en cuestión de relaciones públicas, es debido al tema de la privacidad y la seguridad dentro de su plataforma, y estos temas han sido precisamente la razón por la que Israel ha calificado a la red social de Mark Zuckerberg como “un monstruo que amenaza a la seguridad”.
El origen del conflicto se debe a la postura de Facebook en cuanto a los mensajes de odio que se publican dentro del servicio. Por una parte, Facebook aseguró hace un par de meses que tomaría acciones en contra de este tipo de post, sin embargo, en consideración de las autoridades de Israel, las acciones han sido lánguidas e insuficientes.
Cabe recordar que de forma histórica, Israel ha sido el foco de diversos ataques racistas, incluido el Holocausto acontecido durante la Segunda Guerra Mundial, por lo que se trata de un tema particularmente sensible para esta nación.
Gilad Erdan, ministro del interior israelí, ha asegurado que Facebook es un “monstruo” que atenta contra la seguridad de su país.
Debido a esta postura, Israel contempla una iniciativa de ley que pretende obligar a distintas redes sociales, como Facebook, Twitter, YouTube, entre otras, a colaborar con la policía local para revisar y eliminar mensajes de odio y que promueven el terrorismo.
Sin embargo, el tema no es tan sencillo de tratar para las empresas responsables de redes sociales, ya que a la vez que regulan el tipo de mensajes que se publican, esto también puede resultar en una violación de la privacidad de millones de personas, e incluso puede cruzar la línea con el tema de la censura en internet.
Las empresas tienen el reto de equilibrar su cooperación con las autoridades de cada país para evitar el racismo y otros males que aquejan a las sociedades contemporáneas, al mismo tiempo que se garantiza la privacidad y seguridad de cada usuario.