El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, confirmó la llegada de Patricia Espinosa como la nueva responsable del cambio climático en la Organización.
Warmly welcome @PEspinosaC to UNFCCC secretariat https://t.co/YRVVGaK3Sj pic.twitter.com/6kTWTaLU4o
— Christiana Figueres (@CFigueres) 19 de mayo de 2016
La llegada de Espinosa será al frente de la secretaria ejecutiva de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático.
El nombramiento implica un paso clave en la imagen de México a nivel mundial, dentro de una tendencia donde el cambio climático y la sustentabilidad están determinando nuevos hábitos de consumo y estilos de vida.
La imagen política de México es la que mayor impacto tendrá con el nuevo nombramiento de una mexicana al frente de esta oficina de la ONU, luego de que el presidente Enrique Peña Nieto declaró durante la pasada celebración del Día Internacional de la Madre Tierra, “que es posible asegurar un nuevo régimen climático, sin frenar el desarrollo económico y social”.
Esta no es la primera vez que un país tiene la posibilidad de construir su imagen tras el nombramiento de un connacional dentro de un cargo internacional.
Kofi Annan, exsecretario general de la ONU, creo una marca personal a raíz de su nombramiento en la Organización, marca que se fortaleció con el galardón del Premio Nobel de la Paz obtenido en 2001.
En la actualidad, este reconocimiento de marca con que cuenta Annan, le ha permitido dirigirse a los líderes políticos de toda la región africana, en un reciente llamado con que buscó mayor democracia y la erradicación de la intolerancia a las voces de oposición.
Frente a esta oportunidad, las posibilidades de México de construir marca país a través de su trabajo con el cambio climático, abre una nueva ventana que se amplía en beneficio de otros conceptos como el Hecho en México, lo que debe llevar a hacer nuevos ajustes, en la medida en que se entienda que la oportunidad es para colocarse en las preferencias del mercado, siendo tendencia y líder como ocurrirá con la llegada de Espinosa dentro del tema climático en la ONU, que es ya el pretexto perfecto para lograrlo.